La Policía Nacional detuvo en un piso del distrito de Russafa de València a una madre, de 34 años, por pegar a sus hijos de, cinco y ocho, con un matamoscas.

El aviso lo dio una mujer que estaba en su casa viendo la televisión, cuando de repente comenzó a escuchar gritos, lloros y golpes. Salió al balcón y allí observó cómo la vecina de otra finca le pegaba con una especie de palo a su hijo menor, motivo por el que le llamó la atención diciéndole que no le agrediese. Al darse cuenta de que estaban pendiente de ella, la ahora detenida dejó al niño menor y cogió al mayor.

La progenitora fue detenida por un delito de malos tratos y los agentes entregaron a los hijos a su padre, que se presentó en la casa a los pocos minutos.