Una vaquilla que participaba en una exhibición taurina de las fiestas de Alcalà de Xivert resultó muerta en la madrugada del viernes al sábado, tras haberse escapado del recinto acotado para estos actos. Los hechos ocurrieron pasadas las 3.30 horas, cuando estaba programado este evento. La res logró superar la barrera que constituye la vía del tren, situada justo al lado del coso con los cadafals, y llegó hasta la calzada de la carretera Nacional 340, que discurre en paralelo.

La fuga del astado completó un recorrido breve, ya que la mala suerte hizo que una furgoneta que pasaba por este vial se cruzara en su camino. Como resultado, la vaca murió, mientras que el vehículo sufrió un impacto en la parte frontal. Afortunadamente, el conductor no sufrió daños personales. La afección sobre la N-340 fue escasa, ya que en esas horas el tráfico es mínimo. Esta circunstancia fue un tema común de conversación local en la mañana de ayer, que contó con una densa agenda taurina.

Se trata del segundo incidente en las celebraciones de este municipio que se salda con la muerte de una vaquilla. El martes, en el segundo día del concurso de ganaderías, un animal murió al caer desplomado en la plaza.

PRECEDENTES / A pesar de que las comisiones se esmeran cada vez más en reforzar la seguridad de este tipo de festejos, en algunas ocasiones saltan a los titulares las escapadas de reses. El caso más reciente ocurrió este mismo verano en la Vall d’Uixó, cuando todos los toros de un encierro lograron salirse del recorrido al romper una ratera. Otro momento recordado tuvo como escenario Burriana, cuando huyeron dos vacas el pasado año. Una de ellas pudo ser capturada al cabo de unas horas, pero la otra protagonizó una larga fuga. El listado reciente tiene como tercer espacio les Coves de Vinromà, con una huida de varias vaquillas en el transcurso de sus fiestas.