Castellón resiste, por el momento, al envite del coronavirus, cuya afección comienza a preocupar en algunas zonas de la Comunitat Valenciana. Aunque la experiencia ha demostrado durante la pandemia que ningún territorio está a salvo, que toda precaución es poca y que las tornas pueden cambiar rápidamente, lo cierto es que la provincia parece estar, por ahora, lejos de la situación que atraviesan Valencia y Alicante, con positivos en 18 residencias y casi dos decenas de brotes.

Sanitat alertó ayer de un rebrote con cinco positivos en la capital de la Plana, relacionados con el ocio; pero en el resto de la Comunitat ascienden a un total de 17.

Pese a este nuevo rebrote en la provincia (el anterior se dio el día 31 en Moncofa con seis casos), los nuevos infectados van en descenso en Castellón --ayer fueron ocho, frente a los 10 del martes y los 15 del lunes-- y los ingresos hospitalarios se reducen a una decena, sin necesidad de cuidados intensivos. Además, las altas son más del triple (27) que los nuevos casos confirmados con PCR y no se registran fallecidos (la lista se mantiene en 227 víctimas mortales desde el pasado 19 de junio).

Valencia y Alicante, sin embargo, sumaron ayer 169 positivos más (frente a 68 altas) y cuentan con un total de 120 ciudadanos hospitalizados, según el último balance de la Conselleria.

Los casos de coronavirus se multiplican en el entorno familiar y entre los grupos de amigos de la Comunitat. Así lo comunicó ayer la consellera de Sanidad, Ana Barceló, en una rueda de prensa en la que desveló que el 48% de los infectados contraen el coronavirus en reuniones privadas con sus más allegados. La franja de edad entre los 15 y 34 años es la que más positivos concentra --un 55,5%-- y aunque los afectados presentan cuadros leves, preocupa su «capacidad de transmisión» a otros colectivos más vulnerables. Aunque solo el 6% de los jóvenes entre 20 y 29 años requieren hospitalización, el contagio a personas de avanzada edad o con patologías previas puede tener consecuencias graves.

EL 38%, ASINTOMÁTICOS

Barceló destacó también que casi el 38% de los nuevos enfermos son asintomáticos. Por una parte, se trata de un hecho inquietante ante la posibilidad de que infecten a terceros y no guarden cuarentena; por otra, demuestra, según la consellera, que el sistema de rastreo y seguimiento actual funciona.

El número total de pruebas llevadas a cabo para la detección del coronavirus en la Comunitat asciende a 486.876 pruebas PCR. «Los test para la detección del covid-19 son un 66% más ahora que hace un mes, por lo que los positivos se han multiplicado por 16», dijo la consellera a los medios.

ACTOS CON AUTORIZACIÓN

El área de Sanitat que dirige Barceló se ha puesto en contacto con los ayuntamientos de la Comunitat para solicitar su colaboración en la vigilancia estrecha de reuniones familiares, encuentros o actos populares que se desarrollen en sus municipios. «Aquellas actividades con una afluencia superior a 50 personas deberán contar con la autorización municipal para su realización y la misma estará supeditada a la situación epidemiológica del momento», dijo la consellera, quien puntualizó que deberán ser los organizadores quienes pidan el correspondiente permiso a los ayuntamientos.

A pesar de los últimos rebrotes y las convenientes advertencias de las autoridades sanitarias, la situación en la Comunitat sigue siendo sensiblemente mejor que en otros territorios. La tasa autonómica de incidencia acumulada se sitúa en el 39,11%, según apuntó ayer la Generalitat, frente al 75,29% que se registra en España.

Aragón es en estos momentos la región europea con más casos, con una incidencia que se ha multiplicado por diez en apenas 20 días. Allí preocupan, sobre todo, Zaragoza y los brotes en residencias.

El gobierno vasco, por su parte, lanzó ayer un mensaje de alarma al situar a Euskadi en «la segunda ola epidémica», mientras que Castilla y León decidió confinar Aranda del Duero ante la elevada tasa de contagios detectada.

El Ministerio de Sanidad comunicó ayer 1.683 contagios en 24 horas y 580 brotes activos.

Restringirán visitas para proteger a las residencias

La consellera Ana Barceló anunció ayer una nueva medida que se implantará próximamente y que afectará a las residencias de mayores. «En aquellas que se encuentren en departamentos de salud o municipios donde la pandemia haya tenido mayor incidencia, se suspenderán las visitas a los residentes y las salidas del centro», incidió en rueda de prensa, ante los medios.

Para ello, la Conselleria ultima una resolución por la que, a través de un informe epidemiológico, se justificará el cese de entradas y salidas en estos centros. Sanidad quiere prevenir así que las residencias vuelvan a estar en el ojo del huracán del virus, ya que en estos momentos casi la mitad de los casos se han producido en población que se sitúa por debajo de los 40 años --la que hace más vida social--.

En estos momentos ninguna residencia de Castellón cuenta con casos positivos de covid-19, lo que ofrece a la provincia una situación de relativa tranquilidad respecto a Valencia y Alicante, que sí tienen infectados --usuarios o trabajadores-- en un total de 18, siendo 16 de ellas de personas de avanzada edad. Dos de esos centros están, además, bajo vigilancia activa de la Generalitat Valenciana.