El mundo gira alrededor de Internet. Expertos en big data, creadores de apps, responsables en seguridad digital, especialistas en comercio electrónico y marketing digital, desarrolladores de videojuegos... son algunas de las profesiones del presente, y buena parte de los jóvenes emprendedores que en los últimos años han creado una compañía de éxito en Castellón lo han hecho en este sector. Un par de datos bastan para entenderlo; mientras hace unos años ni siquiera existían, hoy al menos una veintena de empresas de la provincia destacan como creadoras de apps de éxito. Y otro apunte más. Entre mayo del 2015 y mayo del 2016 el número de cotizantes en la sección de actividad denominada información y comunicaciones, que incluye la programación informática y las telecomunicaciones, ha pasado de 1.779 a 1.896. O dicho de otra manera: 90 afiliados más, un 5% en términos porcentuales. Y todo apunta a que la generación de empleo tecnológico va a seguir creciendo en los próximos años. Pero, ¿hay vida más allá de lo digital? ¿Se puede innovar y tener éxito en una actividad económica ajena a Internet y al móvil?

Francisco Negre, director de Espaitec, aseguró que el mundo digital afecta ya a todas las divisiones de un negocio. “Robótica, big data.... Todo está interrelacionado”, argumentó el máximo responsable de un parque científico donde el 40% de las empresas son digitales. Negre defendió también que en los últimos años se ha hecho un esfuerzo para generar conocimiento, pero “todavía no somos capaces de revertirlo”, de ahí que el reto pase por “transformar la realidad y apostar por una sociedad más innovadora”.

Para el director del Espaitec, impulsar nuevas iniciativas empresariales es positivo, pero también es importante que los proyectos perduren en el tiempo. “No se trata de tener tantas iniciativas, sino de que crezcan y se consoliden”, concluyó Negre.

DIGITAL y TRADICIONAL // Justo Vellón, director del CEEI de Castellón, subrayó que el sector digital “es muy potente y crece mucho”, y defendió la necesidad de unir iniciativas empresariales vinculadas a las apps o a los videojuegos con sectores más tradicionales, como el turismo. “De la unión de ambos pueden salir iniciativas que faciliten la estancia o la vida a los turistas”.

Vellón lamentó también el descenso del peso del sector industrial. “Hoy la industria representa el 12% del PIB nacional, mientras que hace unos años era del 25%”, dijo, al tiempo que recordó que se han destruido 50.000 empresas, de las que 6.000 estaban en la Comunitat Valenciana. “Lo que está claro es que la industria debe subirse al carro digital y que los dos sectores, el de las nuevas tecnologías y el industrial, están condenados a entenderse”.

José Luis Sánchez Mohino indicó que ya es impensable abrir un negocio sin tener una visión digital. “La generación de los millennials son nativos digitales y los emprendedores mayores de 35 años también están aprendiendo”, dijo el representante de la Cámara de Comercio.

Pese a lo que pudiera parecer, buena parte de quienes emprenden en Castellón superan los 30 años. “La edad media del emprendedor en la Comunitat está en los 36 años”, describió Francisco Negre, que también se refirió a lo que muchos expertos vienen a denominar burbuja emprendedora. “Hay cuellos de botella que hay que gestionar y, cuando gestionas uno, surge otro”, y recordó que no todas las iniciativas funcionan. “La actividad emprendedora es de riesgo”. H