La apuesta de Castellón por construir campos de golf que vertebren una oferta turística y residencial, auspiciada por el aeropuerto, se ha reducido a casi la mitad en los últimos siete años. El capital necesario para materializarlo, ni llega ni se le espera. De las 19 localidades que en 2009 apostaban por proyectos de este tipo, ahora apenas quedan una decena, y la mayoría con muchas dificultades para sacar adelante los PAI programados.