La ciudad de Vila-real vuelve a convertirse desde ayer y hasta mañana domingo, por 31 años consecutivos, en capital del teatro de calle con la celebración del FITCarrer, que arrancó ayer con las primeros espectáculos, que se desarrollaron en el parque de la Mayorazga, por la tarde; y, por la noche, en la plaza Major.

La argentina María Cavagnero, los castellano-leoneses de Maintomano, los vascos de Markeliñe fueron los encargados de llenar de cultura el municipio, en la jornada inaugural del certamen internacional. Sin embargo, la lluvia de la tarde obligó a suspender la actuación de los aragoneses de D’Click, en la Mayorazga.

Previamente, durante la mañana y en el salón de actos de la UNED de Vila-real, profesionales del sector llegados de diferentes puntos de España participaron en una cita en la que los presentes coindicieron en confirmar que, en la actualidad, se está dando un «retroceso en la libertad de expresión, especialmente en lo que respecta a la creatividad», explicó a Mediterráneo el director del Festival Internacional de Teatre de Carrer, Pau Ayet.

En este sentido, Ayet indicó que el debate también se centró en «buscar la forma de que la gente entienda que las expresiones artísticas son formas de dar un punto de vista determinado, aunque no te pueda gustar». E hizo un llamamiento a «hacer frente a esa presión que imponen unos pocos, vinculada a su moral».