El inminente derribo del pabellón Campió Llorens ha despertado en muchos de aquellos que han pasado horas y horas compitiendo en sus instalaciones el interés por conservar algún recuerdo de un polideportivo que, a principios de los años ochenta, fue sede, incluso, de partidos de baloncesto de la segunda categoría nacional, gracias al ascenso protagonizado por el ya desaparecido CB Villarreal.

Y el parquet es uno de los elementos que podrían convertirse en un suvenir, a juzgar por el atractivo que parece despertar entre los deportistas que lo utilizaron hace décadas y también en los que lo usan ahora. Muestra de ello es la instancia presentada en el Registro del Ayuntamiento de Vila-real por Pascual Broch, miembro de la directiva del Esportiu Bàsquet Vila-real, en la que solicita que, “ante la próxima demolición del pabellón polideportivo Campió Llorens y como integrante del CB Villarreal (1980/81) y Penya la Merla-Luycris (1991/92) que ascendieron en la citada instalación”, solicita recibir un trozo del actual parquet del pabellón antes de que sea derribado.

“Todo surgió como una idea que se manejaba desde hace más o menos un año y medio, coincidiendo con los rumores de que el edificio iba a desaparecer, y que ahora se ha plasmado en esta petición formal al consistorio”, explica Broch, quien hace hincapié en que el Campió Llorens “forma parte de la historia del baloncesto, no solo en Vila-real sino en la provincia, porque fue, junto al de la Sindical de Castellón, el primer espacio cubierto en el que los equipos de la época jugaron en competición nacional”. H