Del 14 de abril al 8 de mayo. Estas son las fechas que la Concejalía de Turismo de Vila-real plantea para desarrollar la Ruta de la Tapa, una iniciativa pionera en la provincia de Castellón y que, este año, cumple su 10ª edición.

Es por ello que, con este motivo, desde la delegación que encabeza el edil Emilio Obiol, se quiere dar una relevancia especial a este evento gastronómico.

Así se dio a conocer ayer por la tarde en la primera reunión entre responsables municipales, técnicos del Ayuntamiento y dueños de bares y restaurantes interesados en tomar parte en este certamen gastronómico.

A este respecto, desde el consistorio confían en contar con una oferta similar o superior a la del 2015, cuando participaron 30 establecimientos hosteleros y se generó un volumen de negocio que superó los 93.000 euros, al servirse más de 37.000 tapas.

De hecho, fuentes municipales consultadas por este rotativo aseguran que, por el momento, “hay algunos restaurantes que han mostrado su interés por sumarse a esta 10ª edición de la Ruta de la Tapa de Vila-real” que, como en años anteriores, finalizará poco antes de iniciarse las fiestas patronales de Sant Pasqual, con la finalidad de no interferir en los diferentes acontecimientos gastronómicos que se desarrollan durante estas celebraciones. H