El pleno extraordinario celebrado ayer en el ayuntamiento de Vila-real desbloqueó el pago de 456.000 euros a proveedores. El punto salió adelante con los votos a favor de PSPV, Ciudadanos, Unidas Podemos y Vox, y la abstención de Compromís y Partido Popular, después de más de un mes en el que la partida ha estado retenida por las alegaciones de una funcionaria municipal.
Según explicó el alcalde José Benlloch, una empleada pública emitió un informe en el que se exponía que la modificación de crédito incumplía la ley de estabilidad presupuestaria. Esta situación hizo que el dinero permaneciera retenido y no se pudiera pagar a las empresas que, en algunos casos, ya habían realizado los trabajos. El consistorio se ha visto obligado a solicitar un informe al jefe de la oficina presupuestaria que ha desestimado dichas alegaciones y que fue ratificado en la sesión plenaria.
El casi medio millón de euros se ha invertido en trabajos de mantenimiento del Termet, la ermita y colegios, en servicios culturales, actividades deportivas y de juventud, la financiación de los gastos de los partidos políticos, congresos o para las fiestas, entre otros asuntos. Al no disponer de liquidez, debido a la complicada situación financiera que atraviesan las arcas municipales, se recurrió al uso del remanente del ejercicio anterior. Con esta modificación de crédito se podrán restablecer las cuentas.
