El salón de actos de la UNED acogió ayer la reapertura del ciclo Conferencias Blancas que se organiza desde el departamento de Filosofía de la sede vila-realense de esta universidad. Y lo hizo a lo grande, con la participación de uno de los eruditos judíos de mayor proyección internacional.

El teólogo argentino de origen sefardita, el profesor Mario Sabán --doctor en Filosofía, Psicología, Antropología e Historia, además de director de la Cátedra de Pensamiento Judío David Melul--, fue el encargado de arrancar un nuevo periodo de estas charlas-coloquio, que ya son todo un referente a nivel estatal y han logrado diferentes reconocimientos.

Sabán hizo un riguroso análisis de la historia del antisemitismo en todas sus vertientes, desde la económica a la religiosa y la social. Un antisemitismo que considera que en España no existe o es muy residual, a la vez que asocia los pocos casos de rechazo hacia todo lo que es judío a “la ignorancia” sobre las costumbres de este pueblo.

Asimismo, el profesor también abordó con todo lujo de detalles --máxime teniendo en cuenta la escasa duración de la charla-- la aportación que la cultura judía ha hecho a la sociedad occidental.

Respecto al conflicto que enfrenta desde hace décadas al Estado de Israel con los palestinos y el mundo árabe, Sabán aseveró con rotundidad que “la gran mayoría quiere la paz, pero esa paz tiene que venir desde las dos partes”. Y añadió que “todo fundamentalismo odia al prójimo y, por tanto, tiene poco de religioso”. H