"A partir del 11 de noviembre confío en retomar las conversaciones con el Gobierno central para avanzar decididamente en la construcción de una nueva comisaría de la Policía Nacional, que es absolutamente necesaria».

Con estas palabras se dirigió el alcalde de Vila-real, José Benlloch, a los agentes y mandos que participaron ayer en los actos conmemorativos de la festividad de los Santos Ángeles Custodios, patrones del Cuerpo Nacional de Policía. Palabras que refrendó posteriormente, admitiendo el «bloqueo» que la interinidad del Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez provoca en un proyecto que «está muy encauzado, porque hay una absoluta sensibilidad, tanto por los responsables de la Policía Nacional como por el Ministerio del Interior, que han mostrado su disposición a abordar una solución».

Y añadió que «no queda ninguna ciudad como esta en España con una comisaría tan vergonzosa en cuanto al espacio en sí como a los recursos que dispone, algo que podrá revertirse si continúa el actual Gobierno de Sánchez, con el que ya estaba todo muy encarrilado», puntualizó.

Asimismo, Benlloch hizo hincapié en que desde el Ayuntamiento de Vila-real están en disposición de cumplir con sus deberes, porque ya han «avanzado en ello», en relación a la disponibilidad de un espacio para construir la nueva comisaría. Al respecto, concretó que la primera opción sigue siendo la de ceder parte del actual párking frente al Palau de Justícia, aunque no descartan otros emplazamientos.

La Policía Nacional de Vila-real celebró ayer la festividad de los Santos Ángeles Custodios, con la tradicional revista y ofrenda a los agentes caídos. El inspector jefe de la comisaría, Carlos García, destacó la incorporación de 15 nuevos efectivos y la paulatina presencia de la mujer en el cuerpo. Concretó que son 11 las agentes que realizan labores operativas en la ciudad.