Las microondas son muy populares hoy en día y en el futuro lo serán aún más. El caso, es que todos los días son muchas las personas que se calientan la comida utilizando microondas y son también legión los que las utilizan para comunicarse mediante la telefonía móvil. Todo parece indicar que en el futuro habrá todavía más microondas en nuestra vidas.

Pero vayamos por partes. La radiación electromagnética comprende ondas muy energéticas como los llamados rayos X, que se utilizan para vernos las entrañas, y los rayos gama, que se utilizan para matar tumores, y otras ondas mucho menos energéticas como la radiación ultravioleta y los rayos infrarrojos que nos calientan y cambian el color de nuestra piel. También tenemos la luz con toda la variedad de colores, que es la radiación electromagnética a la que nuestro ojo se ha hecho sensible. Si reducimos un poco más la energía de la radiación electromagnética nos encontramos con las microondas. Estas ondas poseen longitudes de onda del tamaño del milímetro y son las preferidas por el hombre moderno para dar el salto adelante en muchos y diferentes campos del quehacer humano.

De todas estas radiaciones hay fuentes naturales y artificiales. Por ejemplo, los rayos gamma los emiten los núcleos de los átomos, los rayos X, los ultravioleta, infrarrojos y la luz son emitidos por los electrones de los átomos y algunas moléculas. Pero el hombre dispone de máquinas que hacen las veces de núcleos y átomos y con ellas dispone fácilmente de toda esas radiaciones. El caso de las microondas es bastante diferente.

Primero de todo, el universo es el mejor emisor de microondas. En otras palabras, la temperatura del universo es de -270 °C y resulta que a esa temperatura todos los cuerpos emiten radiación de microondas. Del espectro de microondas del universo, los astrónomos y astrofísicos intentan obtener información de cómo se produjo el enfriamiento del universo después de ocurrir el big bang. En concreto, las microondas son portadores de información del universo tal y como era unos pocos de cientos de miles de años después de ocurrir el big bang. Así pues, las microondas juegan respecto al universo el mismo papel que la foto de una persona de 80 años obtenida a los pocos días de haber nacido.

Pero siendo este pasado interesante y fundamental para entender mejor todo el universo, las microondas son objeto de deseo científico y tecnológico por otros muchos y variados motivos.

El primero es el tamaño que poseen: la longitud de onda de las microondas es del orden del milímetro por lo que son ideales para observar objetos de este tamaño.

En segundo lugar, las microondas atraviesan fácilmente nuestro cuerpo, por lo que nos pueden mostrar todo lo bueno y malo que tenga el tamaño de un milímetro.

En tercer lugar, las microondas no son absorbidas por la atmósfera por lo que pueden utilizarse para llevar grandes cantidades de información a la velocidad de la luz de la Tierra hasta un satélite, y vuelta a la Tierra. En los próximos años en las telecomunicaciones se utilizarán microondas de más energía que las actuales.

En cuarto lugar, si bien hasta ahora no había fuentes naturales de microondas, parece que los científicos han dado con unas moléculas capaces de producir una gran potencia de microondas.

En quinto lugar, resultados de investigaciones muy recientes indican que utilizando microondas se puede fabricar el equivalente a lo que es un láser de luz visible.

Y, por último, resulta que muchos de los llamados objetos nanométricos, esos que han dado lugar a lo que se ha denominado nanociencia, emiten y absorben microondas.

En definitiva, que si alguien albergaba alguna duda de por dónde irían los tiros del futuro, las microondas se lo desvelarán rápidamente. ¿Quién da más?