Me siento orgullosa de que una diputada autonómica castellonense como Marina Albiol y una hermana y compañera de lucha como la directora de teatro y exdiputada socialista de la Asamblea de Madrid, Mercedes Lezcano, formen parte de la Flotilla de la Libertad que ya ha puesto rumbo a Gaza. Segunda caravana marítima para la esperanza, para reivindicar que termine el acoso en esta franja de Palestina, que Israel acabe con el bloqueo que mantiene sobre esta dañada población, más de millón y medio de palestinos que se refugian en la cárcel más grande del mundo.

Doce barcos están partiendo un año después de que la primera flotilla fuera brutalmente atacada por el ejército israelí. Son más de 500 personas, activistas, artistas, periodistas y, de ellas, más de 40 ciudadanas y ciudadanos españoles que viajan a bordo del Gernika. Soñar y luchar por un estado palestino libre y soberano es defender una causa tan justa como necesaria que, además, cuenta con el reconocimiento de instituciones como la ONU. Pero Israel está empoderado, se crece y juega con la indecisión y los agujeros negros en moral y ética de países como el nuestro, como el resto de Europa o como EEUU. La sociedad civil española y europea se ha puesto en movimiento desplegando solidaridad, coraje, firmeza, y llevando a Gaza el mensaje contundente de defensa de la paz, y diez toneladas de ayuda humanitaria

Yo también soy esta flotilla, hace tiempo que conozco de cerca el sufrimiento del pueblo palestino, de mujeres y hombres que sobreviven en medio de la nada, de políticas imposibles, injustas, interminables. El escritor sueco, detenido el pasado año como integrante de la primera flotilla, Henning Mankell, nos recuerda la responsabilidad que tenemos la sociedad europea, sobre todo los periodistas, de entender el mundo fuera de la perspectiva local. Hay que dar la cara, visibilizar y poner voz pública a los problemas de estos países que, a pesar de que se vean lejanos, están muy cerca de nuestra realidad. Palestina, Sahara, Argelia, Maruecos, Libia, Túnez, Siria… Somos hermanos mediterráneos. H