Los Gobiernos socialistas de Sánchez y Puig no tienen término medio: o nos condenan a recortes, o nos fríen a subidas impositivas. En el capítulo de recortes, los castellonenses seguimos sufriendo la supresión de frecuencias en trenes de Cercanías y Regionales, que circulan masificados en las horas punta.

Y si hablamos de infraestructuras, no podemos olvidar el tijeretazo de Sánchez a la prolongación de la autovía A-7, que debía unirnos con Tarragona, pero que Ábalos ha decidido que de Vilanova d’Alcolea no pasa. No hay dinero para mejorar la red viaria de Castellón, pero sí para rescatar la aerolínea Plus Ultra, 53 millones de todos los españoles, que el Gobierno ha pagado a una empresa controlada por empresarios venezolanos considerados próximos a Maduro.

Más recortes: los que van a sufrir nuestros pescadores en sus horas de faena, como consecuencia del plan de pesca del gobierno socialista, o los que van a padecer en sus ingresos los agricultores, por la plaga del cotonet. Y el Consell de Ximo Puig tampoco se queda a la zaga con los recortes: cierre de consultorios sanitarios auxiliares, cierre del CICU, despidos de 563 profesionales sanitarios en la provincia de Castellón… un suma y sigue de retallades inacabable.

Y en el capítulo de subidas, la más escandalosa es la de la factura eléctrica. La subida de la luz sigue imparable y estrangulará en junio a consumidores particulares y a empresas. Y mientras tanto, el gobierno progresista mirando hacia otro lado: hacia los condenados del procés. Para Sánchez su prioridad ahora son los indultos a los golpistas. Nada más. Y así estamos, al borde del abismo económico e institucional, con un Gobierno que solo piensa en salvar su sillón.

Senadora del PP y portavoz del PP de Castellón