A FONDO

Vila-real ‘is different’

4,3 millones de euros de remanentes para cubrir los costes de servicios esenciales

José Benlloch

José Benlloch

Hace escasos días, con un tremendo esfuerzo, logramos liquidar el presupuesto de 2023. Un ejercicio que hemos cerrado con un remanente de nueve millones de euros. Hemos podido cerrar la liquidación más pronto que nunca gracias al esfuerzo de los técnicos municipales, conscientes de la difícil situación económica que tenemos y que estamos gestionando para recuperar la estabilidad. ¿Qué significa liquidar el presupuesto con nueve millones de remanente? ¿Es lo que ha sobrado del presupuesto del año pasado? En absoluto: aquí no sobra nada. Los remanentes de tesorería no caen del cielo. Son el resultado de una gestión prudente y responsable, como siempre hemos hecho en el gobierno de Vila-real.

De los nueve millones de euros logrados este año en remanentes, 4,3 millones serán necesarios para prestar adecuadamente los servicios este año. Para cubrir el incremento brutal de los costes (en algunos casos por tres) de algunos servicios esenciales, como luz, gestión de las basuras, limpieza, gas... que estamos soportando en el Ayuntamiento, además de los intereses de la deuda heredada del PP. Incremento de costes que, es cierto, están afectando también a otros ayuntamientos de nuestro entorno y a toda la sociedad en general, y que tienen su origen en la indigna guerra de Rusia contra Ucrania, además de la aplicación de la nueva normativa que encarece la gestión de algunos servicios; tema este que merecerá algunas reflexiones importantes en una próxima ocasión.

Pero Vila-real is different… porque al impacto que estas cuestiones tienen en otros municipios, nosotros tenemos que sumar dos losas tremendamente pesadas, que en estos momentos estamos gestionando y que impactan de manera demoledora en la economía municipal.

Gestión de la pandemia

La primera es que todavía arrastramos los efectos del dinero que tuvimos que destinar a la gestión de la pandemia en los últimos tres años: más de cinco millones de euros en ayudas económicas a las familias y comercios, en acciones de apoyo a la economía local y para la protección de la salud de las personas. El impacto de estos cinco millones todavía se arrastra y nos ha llevado, junto a otras causas (entre ellas la ruina y peligro de quiebra permanente que nos dejó el PP de Vila-real de Folgado y Casabó) a una importante desestabilización económica. Esta situación ha hecho que muchos proveedores que trabajan para el Ayuntamiento no hayan cobrado aún facturas de 2023, y algunas de años anteriores; facturas cuya tramitación estamos en estos momentos priorizando para agilizar al máximo el pago y que los proveedores puedan cobrar pronto, pues quien trabaja tiene que cobrar cuanto antes. No escondo que tenemos la obligación de gestionar las dificultades, es lo que el pueblo ha decidido, y lo hacemos 24 horas al día. Pero desde aquí quiero pedir disculpas a todos los proveedores que, a día de hoy, no han cobrado todavía por sus trabajos o servicios prestados a la ciudadanía. No hemos sabido hacerlo mejor.

La ruina de la deuda

Pero, como les decía, Vila-real is different. Y a todo esto hay que multiplicar la ruina de la deuda y empastres heredado, que ya se ha convertido en el gran desastre del PP de Vila-real, principalmente a raíz de la gestión urbanística de los últimos años de gobierno popular en nuestra ciudad. Este tema es, sin ninguna duda, la gran losa que debe soportar Vila-real, y que otros pueblos y ciudades no tienen. Más de 60 millones de euros pagados ya entre resoluciones urbanísticas y préstamos millonarios y la amenaza constante de nuevos descalabros como los que en breve tendremos sobre la mesa.

De momento, los 4,3 millones de euros de los remanentes que no están todavía comprometidos, gracias a la buena gestión económica del año pasado y la prudencia y responsabilidad en el gasto que siempre hemos defendido y practicado. Estos quedarán a la espera de decisiones judiciales que están a punto de llegar y que nos ponen de nuevo bajo la espada de Damocles. A pesar de esta enorme losa y de las continuas amenazas, como siempre, no dejaremos de trabajar para que, juntos y juntas, Vila-real siga avanzando.

Alcalde de Vila-real