Los españoles se gastaron el pasado año 220 millones de euros en chicles y caramelos sin azúcar, un 13,4% más que el año anterior, cifra que coloca a España por delante de países como Francia, Suiza, Alemania o Reino unido, según un estudio publicado ayer por la empresa fabricante Palatinit.

Mientras que las ventas de chicles registraron un aumento del 11%, hasta 183 millones en el 2003, las de caramelos crecieron un 17%, con unas ventas de 96 millones de euros.

Según el estudio, estos incrementos proceden principalmente del aumento de las ventas de caramelos y chicles sin azúcar, lo que ya supone que nueve de cada diez chicles consumidos en España no tienen azúcar. Mientras que el segmento de los chicles sin azúcar creció en 2003 el 13%, las ventas de chicles con azúcar bajaron el 2%.

El estudio también asegura que las ventas de chicles sin azúcar en España se han más que triplicado en los últimos ocho años (de 52 millones de euros en 1995 a 165 millones de euros en el 2003).

Más de la mitad (58%) de los caramelos consumidos en España son sin azúcar, frente al 42% con azúcar, dato que sitúa a España también como el país líder en el consumo de caramelos sin azúcar.

Las ventas de caramelos sin azúcar han aumentado el 30% hasta 55 millones de euros en 2003 mientras que las ventas de caramelos con azúcar tan sólo crecieron un 3% el año pasado.

Dentro del segmento de caramelos sin azúcar, los toffees han registrado el crecimiento más espectacular (96%) y, en la actualidad, son -junto con los balsámicos y los mini-mints- los preferidos por los españoles.

Las ventas de los caramelos de café sin azúcar han subido el 61% a lo largo del 2003.