La Comunidad de Madrid, que preside Esperanza Aguirre, nombró ayer un comité de nueve expertos, seis de los cuales están relacionados con la Consejería de Sanidad, para analizar los casos de sedación "no indicada, no adecuada o excesiva" en el hospital Severo Ochoa de Leganés (Madrid). Dos de los tres miembros externos debían ser elegidos por la Sociedad de Cuidados Paliativos y la Organización Médica Colegial, pero estas instituciones rehusaron. El único vocal independiente fue nombrado por el Colegio de Médicos.

La designación del comité por parte del Gobierno de Aguirre se produjo sin contar con la junta técnico asistencial del hospital y después de que la fiscalía haya decidido analizar 13 de los casos "dudosos" detectados. Para determinar si hubo negligencia o mala praxis médica, la fiscalía enviará los 13 historiales clínicos a peritos judiciales independientes. Según fuentes judiciales, en la mayoría de los 25 expedientes remitidos por la consejería no se aprecia a primera vista nada irregular, y los datos tampoco permiten deducir responsabilidades penales.

Tres miembros del comité han sido elegidos a propuesta del Consejo Superior del Sanidad, órgano asesor del Gobierno autonómico y cuyo presidente, Enrique Moreno, apoyó la actuación del consejero Manuel Lamela de destituir al coordinador de urgencias tras recibir una denuncia anónima que atribuía 400 "homicidios" en este servicio en los tres últimos años.

El alcalde de Leganés denunció la retirada del hospital "sin orden judicial" de 400 expedientes médicos por seis inspectores de la Consejería de Sanidad.