En España existen más terminales de telefonía móvil que habitantes pero solo uno de cada tres aparatos se recicla, pese a incorporar metales reutilizables como cobre, aluminio o hierro y, en menor medida, otros de gran valor (oro o coltan), por lo que muchos ven en su reciclaje "la minería del siglo XXI".

Los fabricantes y operadores de telefonía en España colaboran con la Fundación Tragamovil, una organización sin ánimo de lucro especializada en la recogida y reciclaje de móviles y accesorios. Tragamovil ha recogido desde el 2001, año de su fundación, 4.200 toneladas de éstos residuos en España, lo que equivaldría a 40 millones de terminales, indica a su director de promoción y comunicación, Julio Lema García. Se estima que un 70% de los componentes de un teléfono móvil pueden ser reciclados, por lo que Lema anima a los ciudadanos a que se informen de los más de 1.000 puntos de entrega que Tragamovil tiene en España.

EL PROCESO Muchos de esos terminales terminan en la fábrica de Indumetal Recycling, en Loiu (Vizcaya), en la que se tratan al año 30.000 toneladas de aparatos electrónicos, entre los que tienen una especial relevancia los teléfonos móviles. Su jefe de planta, Carlos Goiti, destaca que esta factoría tiene unas características únicas en España, ya que consigue unas tasas de reciclado de hasta el 90%, lo que significa que se obtiene esa misma cifra de material puro de cobre, aluminio, hierro o plástico procedentes de aparatos telefónicos.

Los componentes de metal se muelen y las virutas de estaño, aluminio o cobre en la que quedan convertidos nuestros viejos teléfonos después de un proceso de desmontaje, clasificación y triturado, pasan finalmente a fundiciones y refinerías que son las que transforman ese material semipuro en materia prima.

En el mundo se estima que 4.700 millones de personas están conectadas a través de teléfonos móviles, lo que convierte a esta herramienta en una de las que mayor posibilidades tiene como fuente para generar nuevos recursos y materiales.

"Una buena mentalidad a favor del reciclaje del teléfono móvil facilitaría que las personas tuvieran un modelo de vida más sostenible", señala el responsable de una de las compañías que fabrican estos aparatos, el director de Care de Nokia Iberia, Jesús Iglesias. "El objetivo es que el reciclaje sea la minería del siglo XXI", indica Iglesias, quien recuerda que la empresa finlandesa ha reducido el impacto medioambiental de sus teléfonos en un 65%. Iglesias recuerda la importancia del reciclaje de estos aparatos, que pueden transformarse en objetos como bicicletas, pastas dentales o instrumentos musicales.