La Policía ha detenido en Pontevedra a cuatro ciudadanos canadienses, miembros del famoso club de motos Los Ángeles del Infierno, en el momento en que se disponían a recibir un cargamento de casi 500 kilos de cocaína, que había llegado a las costas gallegas en un velero procedente de Colombia.

La operación, realizada en colaboración con la agencia norteamericana DEA, la autoridades policiales francesas y Europol, se desencadenó cuando los agentes tuvieron conocimiento de la presencia en España de un grupo de canadienses miembros del conocido club motorista.

La investigación que estaban llevando a cabo las autoridades internacionales permitió identificar a una de estas personas, perteneciente a Los Ángeles del Infierno en la ciudad estadounidense de San Diego, quien había sido acusado de cinco intentos de asesinato en primer grado y de un delito de conspiración para cometer un crimen.

Además, se había constatado que este sujeto se encontraba en España para recibir el cargamento de cocaína.

Fue localizado en Madrid el 31 de julio junto a dos compatriotas, igualmente integrantes de la organización motorista, y uno de ellos había sido investigado por la policía canadiense y acusado de tráfico de drogas.

En agosto, dos de ellos se desplazaron a Galicia para ultimar los detalles de la transacción de cocaína y, finalmente, la Policía abortó la operación en el mismo momento en que los compradores habían recibido dos furgonetas con la media tonelada de cocaína.

Además de las cuatro detenciones, la Policía intervino los dos vehículos que llevaban la droga, un todoterreno y una autocaravana, cuatro teléfonos móviles y dos teléfonos inteligentes encriptados.