Efectos de la crisis climática

La plaga de procesionarias del pino, desbocada por el calor invernal: "Se han adelantado varios meses"

En condiciones normales, el ciclo natural de estos animales los lleva a estar a ras de suelo durante la primavera

Un nido y un ejemplar de procesionaria del pino.

Un nido y un ejemplar de procesionaria del pino. / / JORDI OTIX

Valentina Raffio

Todo el que haya paseado alguna vez por un bosque, un parque o un espacio natural con presencia de pinos se habrá percatado de la presencia de unas pequeñas orugas que se agrupan en hilera, bajan de los árboles y deambulan por el suelo en busca de un lugar donde enterrarse. Se trata de las conocidas como procesionarias del pino (Thaumetopoea pityocampa), unos insectos autóctonos de las regiones mediterráneas y muy conocidos por su potencial urticante.

Este año estos insectos han empezado a aparecer en diciembre y se están observando en zonas no habituales, como la alta montaña

En condiciones normales, el ciclo natural de estos animales los lleva a estar a ras de suelo durante la primavera. Sobre todo, a partir de marzo. Pero desde hace unos años, según alertan los expertos, el inusual calor registrado en invierno ha adelantado su aparición. Este año, por ejemplo, se ha empezado a detectar entre diciembre y enero, hasta tres meses antes de lo normal. También se están observando en zonas donde antes no se las esperaba, por ejemplo en puntos de alta montaña. Y todo esto, además, ha aumentado los casos de reacciones alérgicas tanto en personas como en animales.

Estos animales son altamente urticantes para los humanos y potencialmente mortales para los animales

Para entender este fenómeno, la ecóloga Mireia Banqué recuerda que estos animales habitan en espacios naturales con presencia de pinos y que, aunque no siempre las veamos, están presentes durante todo el año. Su ciclo vital, igual que el de muchos otros insectos como los mosquitos, depende en gran medida de las temperaturas. "El calentamiento global, y más concretamente las temperaturas inusualmente altas registradas durante los meses invernales, están alterado el ciclo vital de estos insectos. Ahora se reproducen más rápidamente y eclosionan antes", argumenta la experta del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF). Este fenómeno se viene observando desde hace ya unos años pero no ha sido hasta ahora que, tal y como argumenta Banqué, se ha hecho más evidente.

"El calentamiento global está alterado el ciclo vital de estos insectos. Ahora se reproducen más rápidamente y eclosionan antes"

Mireia Banqué

— — Experta del CREAF

La aparición de las procesionarias no solo se ha adelantado sino que, además, parece haberse extendido hacia regiones donde hasta ahora no se las esperaba. "Cada vez se detectan a altitudes mayores", afirma Josep Comellas, del cuerpo de Agents Rurals. "Hasta hace unos años, lo normal era encontrarlas en pinedas situadas a altitudes bajas pero ahora, debido al cambio climático, las temperaturas de alta montaña están subiendo y las procesionarias están encontrado más oportunidades para expandirse en zonas de altura", comenta. Por el momento, este fenómeno solo se ha observado en los bosques pero no es descartable que estos insectos puedan expandirse en parques o espacios naturales urbanos donde, hasta ahora, no tenían demasiada incidencia.

El ciclo de la oruga procesionaria.

El ciclo de la oruga procesionaria. / EPC

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