Los montes de Castellón sufrieron ayer el incendio más importante en lo que llevamos de verano. El fuego arrasó cerca de un centenar de hectáreas de monte entre las localidades de Sorita (Castellón) y Aguaviva (Teruel), y al cierre de esta edición aún no había podido ser controlado. Al parecer, el terreno quemado en la provincia oscila entre 30 y 50 hectáreas.
El fuego se originó a mediodía en las inmediaciones del santuario de La Balma, uno de los principales centros de peregrinación de la zona y que se vió afectado, en el término de Sorita, en el punto Los Cabezos, a medio camino con Aguaviva (Teruel). El viento favoreció en un principio la rápida propagación de las llamas, que pasaron a encontrarse a tres kilómetros de la entrada de Aguaviva. En ese momento, todos los efectivos movilizados se desplazaron hasta la zona y lograron controlar esta parte del incendio. Sin embargo, un cambio en la dirección del viento reavivó el fuego y lo dirigió hacia la provincia de Castellón.
Como medida de prevención y debido al intenso humo, el cámping de Aguaviva fue desalojado por la tarde y sus inquilinos fueron trasladados a un hotel de este municipio turolense. Además, la carretera entre Sorita y Aguaviva sufrió cortes intermitentes durante todo el día, para favorecer la descarga de maquinaria que permitiera crear improvisados cortafuegos y, a la vez, proteger la zona del río Bergantes. En la provincia de Teruel se calcula que fueron arrasadas por las llamas entre 50 y 70 hectáreas.
La dificultad del acceso a la zona de origen del fuego provocó que durante toda la jornada los equipos terrestres pudieran hacer más bien poco y que, por tanto, fueran los efectivos aéreos los que controlaban las llamas. Las causas aún no son conocidas.
Hay que recordar que el perímetro afectado es un referente paisajístico y con un valor ecológico de los más importantes de la Comunidad Valenciana y Aragón, y cuenta con grandes extensiones de pinada y de plantas endémicas. Muchos vecinos de las poblaciones cercanas se ofrecieron como voluntarios para ayudar a extinguir el fuego.
