Una persecución policial en pleno centro de Castelló podría haber acabado en tragedia en la madrugada del domingo. Un conductor, de 23 años y nacionalidad colombiana, se estrelló en la plaza del Real de la capital, junto a la puerta del Sol. Iba bajo los efectos del alcohol --casi cuadruplicó la tasa máxima de alcoholemia permitida-- y carecía de carnet, pues se le había retirado en varias ocasiones por delitos contra la seguridad vial, tal y como ha podido saber Mediterráneo.

El susodicho incumplió el toque de queda y protagonizó el siniestro sobre las 5.00 de la madrugada. El hecho de que las calles estuvieran desiertas a esa hora evitó lo que podría haber sido una auténtica tragedia, pues la zona impactó el conductor se encuentra junto a una conocidísima discoteca y, antes de la pandemia del covid-19, sus alrededores estaban siempre llenos de grupos de jóvenes de fiesta.

Todo comenzó cuando una policía local de Castelló finalizaba su turno y, montada en su vehículo patrulla, observó que por la avenida Vall d'Uixó un turismo realizaba varias maniobras extrañas y que, además, al percatarse de la presencia policial, emprendió velozmente la huida en dirección a la avenida de Alcora, rebasando un semáforo en fase roja. 

Al ver este comportamiento, la agente solicitó la colaboración del resto de patrullas para poder detener al vehículo infractor. Una patrulla policial, perteneciente al GIP, que se encontraba muy próxima al lugar de los hechos observó que este turismo cogía a gran velocidad la rotonda de la avenida Alcora con Pintor Oliet, dirigiéndose al centro a gran velocidad por la avenida Doctor Clara, rebasando hasta cuatro semáforos más en rojo. 

La persecución

La patrulla inició entonces el seguimiento, observando que la velocidad del coche fugado superaba ampliamente la permitida. Al parecer, la velocidad a la que iba el turismo cuadruplicaba la permitida --iba a 120 km/h en un tramo de solo 30--. Al llegar a la calle Navarra, tal era su velocidad, que el vehículo patrulla perdió momentáneamente al vehículo huido de vista y, a los pocos segundos, escuchó un fuerte golpe. Al llegar a la plaza del Real, los agentes observaron que el vehículo fugado se había empotrado contra cuatro turismos estacionados y había causado graves daños al mobiliario urbano.

El conductor resultó levemente herido (presentaba un corte en una oreja y varias abrasiones en los brazos y en el cuello), pero a pesar del ofrecimiento de asistencia sanitaria, éste la rechazó en todas las ocasiones. En ese momento los agentes observan que el conductor presenta evidentes síntomas de encontrarse bajo los efectos del alcohol.

Iba a 120km/h

La patrulla de Atestados de la Policía Local de Castelló se personó en el lugar de los hechos y sometió a la prueba de alcoholemia al conductor del vehículo siniestrado, quien cuadruplicó la tasa permitida. Al mismo tiempo, los agentes comprobaron que carecía de permiso de conducir, por lo que está investigado por la comisión de tres delitos contra la seguridad vial (conducir sin permiso, conducir bajo los efectos de las bebidas alcohólicas y conducción temeraria, superando ampliamente la velocidad permitida en vía urbana).