La Fiscalía investiga el incidente que se produjo este miércoles en Barcelona cuando un taxista embistió a una moto en la que viajaba un niño como acompañante y continuó circulando por la Travessera de Dalt de Barcelona, a la altura de la calle de La Granja sin detenerse, en un altercado que se ha hecho viral en las últimas horas en las redes sociales tras la denuncia de Motoristes BCN:

La Fiscalía actúa tras la identificación del taxista por parte de la Guardia Urbana de Barcelona, que lo ha anunciado a través de un comunicado:

Por su parte, El Institut Metropolità del Taxi (Imet), que depende del Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB), suspenderá la credencial del conductor del taxi hasta la incoación de un expediente sancionador. El Imet ha incoado un expediente informativo para conocer los hechos y también se personará en el juzgado como parte interesada para defender los derechos de los ciudadanos y del colectivo profesional de taxistas.

Medidas cautelares

Ha pedido al titular de la licencia que identifique al conductor del taxi en el momento del incidente, quien tendrá que comparecer en la sede del Imet, momento en el que se dictará, en aplicación de una medida cautelar de acuerdo con el artículo 57.1 del reglamento, la suspensión de su credencial.

Además del ministerio público, el sindicato mayoritario de los taxistas en Barcelona, Élite Taxi, ha anunciado que también lo denunciará y se ha sumado a la condena de lo ocurrido, después de que también lo identificaran. "Condenamos enérgicamente este hecho, como no podría ser de otra manera. Es un proceder impropio por parte de cualquier conductor, y mucho más aún por parte de un profesional del volante", ha subrayado en un comunicado, que ha reiterado que no hay ninguna "excusa ni atenuante" que justifique los hechos.

Insultos y agresiones previas

Según el sindicato, que cita a testigos, previamente el motorista se había comportado de forma agresiva, golpeando el taxi e insultando reiteradamente al conductor.

"Los taxistas llevamos muchos años sufriendo acoso en las calles de diferentes formas, pero nuestro colectivo está lleno de profesionales con un alto sentido de la responsabilidad" y actos como el de que ahora se investiga "son una excepción, que no puede manchar el buen hacer y humanidad de todo un colectivo", ha concluido el sindicato.

Impacto contra la mediana

La brusca maniobra del taxista ahora investigado provocó que el motorista perdiera el control del 'scooter' y que el niño impactara contra el suelo, a quien le cayó encima tanto la moto como el adulto, como se puede comprobar en el vídeo. El taxista, además, llega a chocar contra la mediana de la Travessera y subir la rueda del vehículo a la acera enjardinada. Sin embargo, prosiguió la marcha haciendo caso omiso del accidente.

Los encontronazos entre turismos (sean taxistas o no) y motos son frecuentes en Barcelona. La peculiaridad de este caso es que había alguien grabando lo que ocurría con un móvil. Esta circunstancia llevó a Élite Taxi a tomar partido rápidamente, el mismo jueves, tras la viralización de lo ocurrido: identificó el vehículo y advirtió que lo denunciaría ante la autoridad que regula el servicio, el Institut Metropolità del Taxi.

El sindicato tildó de "tarado" al taxista que embiste al motorista y reclamó "justicia". Desde el primer momento advirtió que informaría a la Guàrdia Urbana y agradeció a los profesionales del sector que, una vez divulgada la grabación, "se han volcado" para identificarlo. En el momento en el que se produce el choque, el taxi lleva la luz de servicio encendida (aplicando la tarifa 2), lo que hace pensar que, además, transporta a algún pasajero en su interior, lo que ha provocado que el Imet considere que se puso en peligro la integridad de los usuarios.

Una segunda moto sin escrúpulos

Otra de las circunstancias que ha llamado poderosamente la atención de quienes han visto el vídeo es que hay una segunda moto que presencia la disputa de tráfico pero no hace nada para socorrer al menor de edad o al conductor que impacta contra el asfalto. En este segundo vehículo viajan también dos personas y, sobre todo el acompañante, se gira varias veces para mirar a los accidentados, pero sigue circulando sin detenerse, igual que el taxista.