La corporación municipal de Vila-real aprobará el próximo martes, en el transcurso de un pleno extraordinario, y de no surgir ningún inconveniente de última hora, su presupuesto municipal para el presente ejercicio del 2021, que asciende a 51,3 millones, después de superar los trámites técnicos y pasar ayer por la comisión informativa de Hacienda.

Se trata de unas cuentas que el ejecutivo local que lidera el alcalde, José Benlloch, tenía preparadas en diciembre, pero que se vieron alteradas por la recepción, días después de ser presentadas a la prensa, de varios dictámenes del Jurado Provincial de Expropiación y de un par de sentencias, relativas a compensaciones económicas a los propietarios de terrenos expropiados u ocupados, básicamente durante el periodo del último gobierno municipal del PP (entre el 2007 y el 2011), para la apertura de calles o para la urbanización de jardines y parques.

INCREMENTO // Con todo, el periodo transcurrido entre diciembre y febrero también ha servido para conocer con exactitud las aportaciones del Gobierno central y de la Generalitat para el año en curso y que, al incrementarse, elevan el presupuesto hasta los 51,3 millones, lo que supone un aumento de 3,6 millones sobre los 47,7 previstos en diciembre. Las cuentas destinan 4 millones a contratos de envergadura en servicios.