El Villarreal B quiere hacer esta temporada del Mini Estadi un fortín. En una categoría tan larga y exigente como es la Segunda División, donde hacen falta tantos puntos para lograr la permanencia, asegurar el mayor número posible en campo propio es muy importante. Y esta tarde-noche (20.00 horas) la escuadra vila-realense dirime un duelo muy importante, donde habrá tres puntos de oro en juego frente a uno de los aspirantes al ascenso a Primera como es el Eibar.
Ambos conjuntos llegan a la segunda jornada tras ganar sus respectivos encuentros del estreno liguero. En el caso del Villarreal B, tumbó al Racing de Santander en El Sardinero en el tiempo de prolongación (0-2), mientras que los armeros se impusieron a otro grande de la categoría de plata, como el Tenerife, en Ipurúa, en un trepidante duelo (2-1).
«Tenemos que jugar en casa igual que fuera. Durante estos años hemos tenido esa mentalidad de jugar siempre más cerca de la portería contraria. A veces los rivales te someten más. En Segunda es un mundo diferente. No te regalan nada», aseguró el técnico del filial, Miguel Álvarez.
Será la primera vez que ambos conjuntos se vean las caras en competición oficial. Curiosamente, en las tres temporadas del filial amarillo en división de plata (2009/10 a 2011/12), el Eibar afrontó sus últimos años en el infierno de la Segunda División B, de la que salió la campaña 2012/13. «En Santander el equipo estuvo muy serio. Este equipo tiene una personalidad brutal. Fuimos a buscar al rival a su campo. Fuimos muy nosotros, así siempre estás más cerca de ganar», aseguró el preparador groguet, al tiempo que hizo un llamamiento para que la afición vaya a verlos en el Mini. «Es una categoría muy bonita y con equipos atractivos. Si acostumbramos a la afición a venir y les damos buen fútbol, se animarán a venir cada vez más», argumentó.
El Villarreal B llega a este encuentro casi con las mismas ausencias que la semana pasada. Recupera al mediocentro Antonio Pacheco, pero mantiene las bajas por lesión de Iker Goujón y Álex Forés. El Eibar de Gaizka Garitano tiene la duda de Álvaro Vadillo por una lesión muscular, si bien podrá contar con su último fichaje: Gustavo Blanco Leschuk.
