La reducción en el número de incapacidades temporales tramitadas se ha producido tanto en la empresa privada como en la pública. Y es que la crisis económica y el miedo al despido han rebajado el número de castellonenses que solicitan una baja laboral. Así lo constatan las cifras del Ministerio de Trabajo, que reflejan que el año pasado se tramitaron en Castellón un total de 30.000 bajas laborales. Un dato muy alejado de las estadísticas de los años previos a la crisis, cuando se firmaban en la provincia de Castellón una media de entre 50.000 y 60.000 partes de baja al año.

Las estadísticas revelan también que el absentismo laboral por motivos de enfermedad común (gripe, resfriados, lumbalgia, migrañas...) ha descendido en Castellón casi un 40%, desde antes que la crisis económica comenzara a destruir miles de puestos de trabajo en la provincia. De hecho, la incidencia por cada 1.000 ocupados ha pasado de 21,85 casos mensuales en el 2006 a los 13,52 del 2011.

PÉRDIDAS // Durante el año pasado los trabajadores de Castellón perdieron 1.828.753 jornadas laborales por incapacidad temporal, según datos de la Conselleria de Sanidad. La cuantía de jornadas perdidas, no obstante, se redujo un 6,19% respecto al 2010, un año en el que se contabilizaron en la provincia 1.949.481 jornadas perdidas. H