La Diputación aprobó, con el apoyo unánime de todos los grupos, que las Normes de Castelló --el conjunto de normas lingüísticas que se firmaron en la capital de la Plana en 1932 para normalizar la lengua catalana y que por tanto consideran al valenciano como el mismo idioma-- sean bien de interés cultural.
Semanas después del debate que ha vivido la esfera política provincial y autonómica al hilo de la ley de señas de identidad que tramita el Gobierno autonómico y en el que el presidente de la Diputación, Javier Moliner, apoyó a la Acadèmia Valenciana de la Llengua (defensora de la unidad de la lengua), PP, PSPV y Compromís aprobaron, sin debate, la moción de este último grupo para reforzar la protección de este grupo de normas lingüísticas fundamentales para hacer comprensible el catalán en todos los territorios donde se habla. Tras la aprobación, el portavoz de Compromís, Enric Nomdedéu, espera que el Consell se decida a dar a las Normes, “el reconocimiento que merece”, algo que bloquea “desde hace cuatro años”. H
