La compañía Xarxa Teatre transformó anoche las calles del Grao en un gran escenario que sirvió para sumergir al distrito marítimo en el ambiente de los festejos populares que se celebraban en el siglo XIX. Con el espectáculo El dolçainer de Tales, una función que se representó ya en el año 1984 y que se retomó en el 2011 --gracias a la petición de Dolçainers i Tabaleters de Castelló--, “pretendemos recrear las fiestas tradicionales de cualquier pueblo valenciano de hace dos siglos”, explicaron desde la compañía. Y, para ello, la formación puso el acento en la propia figura del dolçainer, “una persona imprescindible en este tipo de festejos, pues era quien iniciaba la fiesta y el encargado de continuarla”. En esta cita teatral, organizada por la Peña 29 Sant Pere y dedicada a Vicentico Cenent (alias el 34), no faltaron los cabezudos, los caballos y los toros, y se representaron tradiciones como los bailes, las procesiones o las típicas verbenas.

“Es un espectáculo que involucra al público, ya que se realiza a pie de calle y eso facilita tener un contacto directo con él”, aseguraron desde Xarxa. Toda una firme apuesta que consigue trasladar al espectador a otro universo. H