La Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Burriana trabaja para conseguir que, el próximo curso escolar, haya días festivos en las dos celebraciones más importantes que tiene la localidad en lo que a participación se refiere. Se trata de las fiestas patronales en honor a la Mare de Déu de la Misericòrdia y las Fallas.
Hasta el momento, no venía siendo posible pero, cara al ciclo lectivo que viene, el departamento que dirige Ana Montagut realiza ya las gestiones para aprovechar algún día no lectivo y canjearlo por otros que sí lo son en medio de los festejos para que los pequeños los disfruten.
El hecho de que el día de Sant Josep del 2016 sea sábado favorece la medida, ya que la Generalitat establecerá otra jornada de descanso y el consistorio espera ahorrar ahí una de las de libre designación. Otra de las opciones en las que se trabaja es en prolongar las clases al final del primer trimestre y, en este sentido, no acabar el 22 de diciembre, sino el 23, y lograr dos medios días festivos para inicios de septiembre.
Antes de arrancar el presente curso escolar, la edila ya dio voz a los diferentes agentes sociales de la ciudad, al sector educativo, taurino y fallero, entre otros, para que el Consell escogiera los festivos que mejor creyera.
Para el ciclo 2015/2016, “primero, vamos a ver cuáles son los que da la Generalitat para luego establecer los que son de elección local y que haya descansos repartidos entre las dos celebraciones”, indicó ayer la edila Montagut.
El aprovechar el 23 de diciembre y establecerlo como lectivo para repartir una fiesta más a lo largo del año es algo que ya se ha realizado en Betxí en alguna ocasión, con excelente acogida.
Por otra parte, señalar que ayer tuvo lugar la última reunión del Consell Escolar Municipal de la legislatura -la otra será ya en septiembre- y ya se constituyó la comisión de escolarización. H
