El Ayuntamiento de Vinaròs y la empresa Facsa Aigües de Vinaròs han llevado a cabo una completa reforma en el pozo de la Misericordia, que es el que alimenta de agua al conjunto de la capital del Baix Maestrat.

Para ello, se ha rehabilitado un depósito auxiliar que cuenta con una capacidad de unos 375 m3 y que fue abandonado en la década de los ochenta. “Son trabajos importantes para la mejora del suministro que se ofrece”, ha explicado el concejal de Obras y Servicios, Guillem Alsina.

Este almacenamiento servirá para llevar a cabo tareas de mantenimiento necesarias para el municipio sin tener que causar molestias a los vecinos. Para realizar las actuaciones se han invertido 87.840 euros (IVA aparte).

LOS PLAZOS / Tal y como informan fuentes de la empresa, las tareas, que comenzaron a principios de octubre, está previsto que tengan una duración de dos meses y medio, por lo que se espera que finalicen a mediados de diciembre.

De este modo, se garantiza que la localidad dispone de un servicio de calidad durante el tiempo necesario para desarrollar los trabajos de mantenimiento.