Sin duda, una de las personas importantes en la diócesis de Segorbe-Castellón ha sido -y sigue siéndolo-- Elías Sanz Igual, sacerdote, canónigo, docente, conferenciante, articulista, profesor de religión en el instituto Penyagolosa y en el seminario, que ha ostentado importantes cargos como los de vicario de Pastoral, General y Episcopal con los cuatro últimos obispos de la diócesis, y administrador apostólico; juez del Tribunal Eclesiástico, Consiliario de Acción Católica, y del movimiento de familias cristianas y otros destinos.
En Zucaina, su pueblo natal, ayer, celebró el 50ª aniversario en recuerdo del 19 de agosto de 1962, día en el que fue ordenado por el entonces obispo de la diócesis, Josep Pont i Gol, en la parroquia de Sot de Ferrer, y cantó su primera misa en la iglesia de la Transfiguración de su localidad.
El templo se encontraba repleto de fieles, más de 40 sacerdotes y numerosos amigos llegados de distintas partes de la diócesis y de fuera de ella se unieron para rendirle homenaje de gratitud por sus enseñanzas y dedicación pastoral. Un hombre sereno, de verbo fácil y profundo, amable en el trato y con una sólida formación teológica y filosófica que ha sabido granjearse el aprecio de quienes le han tratado.
La parroquia municipal se volcó en el merecido homenaje a un hijo ilustre de la población y a un sacerdote que, con su vida, ha desarrollado durante este medio siglo una encomiable labor pastoral y diocesana. Quienes le acompañaron supieron reconocerlo en el multitudinario acto, que el protagonista agradeció con amables y certeras palabras en la emotiva y profunda homilía pronunciada ante el público. H
