Menos del 5% de los huertos del término municipal de Almassora están abandonados. Una cifra estimada por el presidente de la Comunidad de Regantes de Almassora, Manolo Claramonte, quien incidió en que la situación del campo almazorense es mejor que la de otros términos.

La explicación de este menor abandono de fincas se encuentra, según Claramonte, en el tamaño de las parcelas y el arraigo de los vecinos con la agricultura. “Suelen ser pequeñas y, además, se tiene amor por la tierra”, afirmó.

No obstante, la mayoría de problemas se produce al pasar la tierra de padres a hijos y estos dejan de trabajar los cultivos. En este sentido, los agricultores recalcan la importancia de la limpieza de los huertos que ya no se cosechan por el riesgo de incendios y de contagio debido a las plagas.

Cabe señalar que desde el Ayuntamiento de Almassora se notificará a los propietarios de las parcelas abandonadas que adecenten sus tierras tras comprobar el estado del campo a través del cabo de Caminos. H