La Concejalía de Turismo de Orpesa ha incluido, por primera vez este año en su programación estival, una ruta por los acantilados. Los excursionistas, que previamente se inscribieron gratuitamente en la actividad, pudieron disfrutar de los espectaculares parajes del termino municipal más cercanos al mar.

La oficina de turismo fue el punto de partida de los participantes. Allí les recibió el alcalde, Rafael Albert, quien también está al frente del área turística. Tras las correspondientes recomendaciones previas, el grupo de participantes, en su mayoría turistas, puso dirección a la vía verde, concretamente al túnel del Bovalar, para iniciar la caminata que les llevaría a pasar de los 30 a los 110 metros sobre el nivel del mar.

Durante el trayecto realizaron varias paradas, donde el guía explicó curiosidades de la historia de la localidad, sus primeros pobladores, fortificaciones o la vegetación mediterránea.

Poco a poco, por un sendero escarpado, pero de escasa dificultad, fueron divisando la riqueza natural que ofrecen los acantilados del municipio. Siguiendo su ascenso por la montaña, la expedición llegó hasta el Mirador.

En ese punto les esperaba la tradicional coca de patata, muy característica de Castellón, y un chupito de licor Carmelitano. Una propuesta que resultó todo un éxito y que esperan que se repita próximamente. H