¡Tiembla Barca, llega el Villarreal! De un solo golpe, el Submarino logró superar su récord de partidos oficiales consecutivos sin perder (ya son 18) y selló el billete a las semifinales de la Copa del Rey, un hito histórico y que coloca a los amarillos en el selecto grupo de equipos españoles semifinalistas en el torneo del KO, en la Champions y en la Europa League (antes Copa de la UEFA). Antes que el Villarreal solo lo consiguieron Real Madrid, Barcelona, Atlético y Valencia.
No fue el partido más brillante, pero sí se volvió a dar un curso de rigurosidad defensiva, y lo cierto es que en el global de la eliminatoria el equipo de Marcelino fue muy superior al de Quique Sánchez Flores. Los goles de Bruno (en la ida) y Gerard Moreno llevaron en volandas a los amarilllos a las puertas de una final por cuarta vez: una de Champions, dos de Europa League y esta de Copa. La supergalaxia del FC Barcelona no lo tendrá fácil para hacer morder el polvo a este Villarreal.
El gol de Bruno en el Madrigal era un renta muy importante para presentarse en el Coliseo Alfonso Pérez, con el plus añadido de la virginidad de Asenjo en la ida. No había que volverse loco y bastaba con mantener las mismas señas de identidad que habían logrado un récord de 17 partidos sin perder, todos en la misma temporada. Marcelino no modificó la hoja de ruta que le había llevado hasta los cuartos de final y mantuvo su criterio de introducir hasta seis variaciones en el once respecto a la Liga, como había venido haciendo en la Copa, incluso también en la Europa League.
ESTRENO DE CAMPBELL // Los puntos más destacados de la dosificación de esfuerzos eran la ubicación de dos centrales zurdos en el eje de la zaga (Dorado y Víctor Ruiz), junto a la reubicación de Rukavina en la banda contraria a donde el serbio se desenvuelve de forma habitual. En el centro del campo, el debut del costarricense Joel Campbell a pierna cambiada se convertía en la principal novedad de la alineación, puesto que el tándem Pina-Manu Trigueros en el centro y Moi Gómez en la banda izquierda se ajustaban al guión previsto, con Uche y Gerard en ataque.
El Villarreal mantuvo muy juntas las líneas, muy bien replegado en su campo y no dejando espacios para que el Getafe plantease un fútbol a la contra. Por su parte, el conjunto de Quique Sánchez Flores sí que formó con un once plagado de suplentes y con cuatro jugadores del filial. La situación en la Liga, coqueteando con el descenso, obligó al técnico a dejar en un segundo lugar la Copa. En la teoría, porque en el campo, los azulones jugaron con mucho orden y ofrecieron pocas concesiones a un Villarreal al que el 0-0 y el paso de los minutos le dejaban en semifinales.
La primera parte quedó marcada por un fútbol muy lineal y con poco ritmo. El centrocampismo plano radiografiaba un partido con escasa presencia en las áreas. El Getafe dispuso de un par de pseudocasiones que Asenjo, en su línea, desbarató con pocos apuros. Y el 0-0, o el empate a nada, era la mejor noticia para los amarillos al descanso.
EL RELOJ, A FAVOR // El Villarreal aplicó la ley del mínimo esfuerzo y la política de que su mejor ataque era el movimiento de las agujas del reloj. No arriesgaron nada los amarillos y el Getafe, aunque tampoco parecía por la labor, acabó creyéndose que podía voltear la eliminatoria. Y dio un susto de órdago a la grande con un centrochut de Freddy Hinestroza que se estrelló en el larguero, provocando el rechace otra oportunidad para los madrileños. El Villarreal seguía apegado a un juego muy horizontal que perseguía la posesión larga de la pelota y el transcurrir del tiempo, incluso la pérdida del mismo que le costó a Asenjo una cartulina amarilla.
El reloj seguía su movimiento y el Geta dominaba en busca de un gol que le otorgaría en primera instancia la prórroga. El Villarreal no sufría pero asumía el riesgo de recibir ese tanto que igualara el cómputo global. Y ocasiones, esta vez, no generaba.
Marcelino decidió dar entrada a Cheryshev y Gio para contagiar un poco de intensidad a un Villarreal soso y aburrido que por primera vez en la temporada especulaba con el marcador pero también esgrimía la paciencia como gran virtud. Y poco a poco los azulones se iban descomponieando. Gio y Cheryshev cambiaron el paso. El orden táctico y la solvencia defensiva de los amarillos acabaron teniendo premio.
GOL DE GERARD // El equipo de Quique pagó muy caro su primer error atrás y Gerard Moreno, que en la ida había tenido hasta cinco ocasiones claras de gol, no perdonó la primera que tuvo anoche y sentenció la eliminatoria a nueve minutos del final. El Villarreal continuaba su racha (ya son 25) de partidos consecutivos viendo puerta. El resto del encuentro sobró. El Submarino superaba uno de sus gafes y se metía en semifinales de Copa por primera vez. Sigue la racha. ¡Tiembla Barca! H
