Los sindicatos convocantes de la huelga prevista a partir de mañana en la enseñanza pública alertan de que los ajustes pueden suponer el despido de hasta 1.000 docentes en la provincia. Lo expuso ayer la presidenta de la Junta de Personal Docente de Castellón, Lola Vives, quien exigió a la Conselleria que explique cómo va a aplicar las medidas del Ministerio de Educación y que afectan al incremento de horas lectivas, de las ratios y la posibilidad de que los institutos impartan solo un grupo de Bachillerato. En función de esto, y de cómo evolucione la matriculación, los despidos de docentes variarían.

Lo expuso tras la asamblea de profesorado en el instituto Penyagolosa, en la que se informó de que el jueves a las 16.00 horas se decidirá, en una nueva asamblea, si los paros se limitan a los días 16, 17 y 22 o se amplían hasta los seis inicialmente previstos.

Vives calificó de "éxito" el referéndum del día 10, en el que participaron 162 centros educativos y en los que votó el 71,1% del profesorado, pidiendo masivamente la retirada del decreto de ajustes. Apuntó que aspiran a igualar los datos de seguimiento de la última huelga general, aunque reconoció el temor a los perjuicios por el coste que representa en términos salariales en tiempos de crisis y el temor de muchos docentes interinos o pendientes de comisión de servicios.

Por otra parte, los sindicatos convocantes Stepv, CCOO, CSIF, ANPE y UGT denunciaron los servicios mínimos fijados por la Conselleria e invitaron a participar en la manifestación que tendrá lugar en Valencia mañana, primer día de huelga. Asimismo, el viernes se enviará una carta al president del Consell, Alberto Fabra, y a la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, para pedirles una reunión y que rectifiquen estos recortes.