El comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, ha decidido cargar las tintas contra Google y ha instado a la compañía del buscador de internet más usado a presentar antes de finales de enero una propuesta de modificación de su sistema de búsquedas que no prime a sus propios servicios bajo la amenaza de “tomar medidas”, en forma de sanciones por “abuso de posición dominante”.

Almunia ha aprovechado una entrevista al diario británico Financial Times para lanzar la advertencia a Eric Schmidt, el actual responsable de las relaciones institucionales de la compañía, con quien se entrevistó en diciembre. “La gente de Google sabe que tiene que presentar resultados y soluciones reales, no explicaciones o comparaciones con lo que sucede en el otro lado del Atlántico”, dijo en referencia al reciente acuerdo de la multinacional con la Comisión Federal de Comercio estadounidense, que ha desistido de inculparles de poner obstáculos a la competencia.

Bruselas investiga desde noviembre del 2010 una denuncia por discriminación de resultados en las búsquedas del lobi ICOMP, que agrupa a Microsoft, empresas de publicidad, viajes, bancos de imágenes y editores de prensa. La denuncia sostiene que Google presenta sistemáticamente primero los resultados de sus divisiones antes que los servicios más valorados por los internautas, que se supone que es lo que prima su famoso algoritmo de búsquedas, y que eso daña la libre competencia.

LOS PUNTOS // El Ejecutivo europeo se muestra preocupado por cuatro puntos del modelo de negocio de Google. Son el “desvío del tráfico” hacia sus servicios; la manera en que copia material original de webs competidoras, como por ejemplo opiniones de los usuarios de hoteles o restaurantes, y lo utiliza en su propia página web sin permiso previo, aprovechando los beneficios que eso conlleva; los acuerdos publicitarios entre Google y sus socios. H