La Policía Nacional ha detenido en Castellón a 62 prófugos de la justicia, sobre los que pesaba una ordena de búsqueda y captura, en tan solo un mes y medio.
Los arrestados estaban reclamados por las autoridades policiales y judiciales por muy distintos motivos. Uno de ellos, español, de 27 años y vecino del grupo San Lorenzo de la capital, estaba siendo buscado por la Policía Nacional como presunto autor de un delito de receptación.
Sin embargo, no era esta la única requisitoria que tenía. Además, tenía dos órdenes de ingreso en prisión dictadas por dos Juzgados de lo Penal de los de Castellón, una de ellas por un delito contra la seguridad vial, y también una reclamación en vigor desde el año 2009 para personarse ante el juez.
Asimismo, cuatro de los detenidos en los últimos días en Castellón, de 25, 26, 30 y 38 años, ingresaron directamente en la cárcel. Sobre ellos, que son de nacionalidad rumana, española, polaca y colombiana, pesaban órdenes de búsqueda, detención e ingreso directo en prisión.
El resto de los prófugos arrestados, 54 personas, estaban siendo buscados para personarse ante las autoridades judiciales de dentro y fuera de la provincia, como parte imputada en distintos delitos. Entre ellos, causas contra la salud pública, malos tratos, sustracciones con fuerza, robos con violencia y quebrantamientos de condena, entre otras cuestiones.
Uno de los detenidos en el último mes y medio fue arrestado por los efectivos y acusado, además, de un delito de falsedad documental, al intentar evadirse de la acción policial e identificarse con una documentación falsa.
Muchos de los huidos de la justicia habían evitado presentarse a los juicios que tenían pendientes, motivo por el cual los magistrados habían ordenado su búsqueda y detención a los agentes.
Esta es, en muchas ocasiones, la única forma de lograr localizar a los acusados y conseguir que se presenten ante el tribunal para enfrentarse a las causas judiciales por las que se les imputa. H
