La Policía Nacional ha detenido a un vecino de Vila-real de 49 años como presunto autor de un delito contra la salud pública, tras descubrirse una plantación de cannabis en su domicilio.

En concreto, los agentes confiscaron un total de 27 plantas en el interior de su casa, ubicada en la calle Molí Bisbal. Al parecer, el objetivo del detenido era vender la droga, que alcanzaba los cuatro kilos, al menudeo. Una actividad que le hubiese reportado 18.000 euros, según ha podido saber este periódico de fuentes solventes.

Los agentes de la comisaría de Castellón averiguaron que podría existir un cultivo ilegal de marihuana durante uno de los numerosos dispositivos establecidos para la detección y el control de los cultivos interiores.

Los efectivos comprobaron que el ahora detenido había convertido una de las habitaciones en un invernadero. Contaba con un sistema de iluminación, ventilación y cuidados fitosanitarios. El detenido cuenta con un amplio historial policial y ha sido puesto a disposición judicial. H