La Audiencia Provincial de Castellón sienta hoy en el banquillo a dos policías nacionales de la sección de Extranjería de la Policía Nacional y el fiscal pide para ellos doce años y medio de cárcel por una presunta agresión a un simpapeles. Los hechos por los que serán juzgados a partir de las 10.00 horas sucedieron en el retén de la Policía Local de Orpesa, en agosto del 2016.

Los dos agentes se desplazaron hasta allí para comprobar la situación administrativa de R.S., a quien comunicaron que tenía una orden de expulsión por estar en situación irregular en España y tener antecedentes penales.

Le dijeron que iban a detenerlo y a trasladarlo hasta la comisaría de Castellón. Según el escrito de la Fiscalía, el inmigrante, en un acto reflejo, se echó para atrás, momento en el que ambos investigados procedieron a reducirlo «de forma desproporcionada», pretexto de una supuesta resistencia. Presuntamente, cuando el hombre ya estaba en el suelo y con las manos engrilletadas, uno de los policías, J.A.P.M., le propinó un golpe en la cabeza que le ocasionó varias lesiones, como un hematoma en el párpado superior derecho y varias erosiones debajo de la ceja, en la zona pectoral y el hombro. Las cámaras de captaron lo sucedido y serán determinantes para condenar o absolver a los policías acusados.

Mediterráneo ha tenido oportunidad de analizar la secuencia en la que la supuesta agresión no parece, a priori, tal.