La parroquia de San Roque se quedó pequeña para acoger a las alrededor de 500 personas que dieron el último adiós a José María Val Cano, el joven de Torrechiva que falleció, junto a otros 17 jóvenes, en el albergue de La Todolella.

"Aquí nunca ha visto una cosa igual", aseguró un vecino, en referencia a la multitud que se congregó en el pequeño municipio de un centenar de vecinos.

La lluvia hizo acto de presencia durante el funeral al que acudieron, entre otras autoridades, el delegado del Consell en Castellón, Joaquín Borrás, diputados autonómicos y provinciales y los alcaldes de la mancomunidad Espadán-Mijares. Pero la lluvia cesó para permitir el traslado, a hombros de sus amigos, del féretro hasta el cementerio.

El alcalde de Onda, Enrique Navarro, tuvo un sentido recuerdo para los fallecidos y, en especial, para José María, de 39 años. "Fue alumno mío en el colegio público Monteblanco de Onda, donde acudían escolares de los pueblos vecinos como Torrechiva, lugar donde estaba empadronado y donde residía en la actualidad el fallecido", destacó.

El alcalde de Torrechiva, Esteban Salas, dijo que "el pueblo entero está destrozado, porque aquí somos todos como una familia". "José María era una persona muy querida", añadió.