PALMA DE MALLORCA. Un turista de 33 años y nacionalidad sueca falleció en la madrugada de ayer al precipitarse desde sa Murada (la muralla) de la Catedral de Palma. Fuentes de la Policía Nacional, que lleva a cabo la investigación, informaron ayer que se descarta el suicidio o la muerte violenta. Por estas razones, se trabaja con la hipótesis de que la caída se haya producido de forma accidental inducida por una ingesta excesiva de alcohol, lo que deberá determinar ahora la autopsia. EFE