Si se cumplen las previsiones de buena parte del sector del turismo rural en Castellón, esta Semana Santa podría suponer un punto de inflexión, lo que daría oxígeno a decenas de pequeños empresarios que hace una década decidieron invertir parte de su patrimonio en abrir un alojamiento en el interior. Y esos resultados, de arribar, llegarían en un momento en el que por primera vez en 16 años el sector pierde oferta turística.
Los datos que maneja la Agència Valenciana de Turisme hablan de que Castellón cerró 2012 con 526 casas rurales y albergues. Son un 3,7% menos que en 2011 (20 en números absolutos) y la primera vez desde 1996 que la oferta resta en lugar de sumar. Ese año la provincia sumaba tan solo 26 alojamientos y 474 plazas. El auge del sector comenzó en 2000 y a partir de esa fecha invertir en una casa rural se puso de moda hasta alcanzar el record de 2011: 546 alojamientos y 4.383 plazas.
Pero aunque la oferta ha decrecido en el último año, Castellón sigue siendo la provincia de la Comunitat con más alojamientos rurales. Valencia cerró 2012 con 343 casas rurales y albergues y 3.934 plazas, mientras que en Alicante las cifras son de 258 alojamientos y casi 2.800 plazas. “Castellón sigue siendo líder en la Comunitat y no me cabe duda que se trata de un sector que está viviendo un momento ascendente”, dice José Pons, diputado provincial de Turismo de Interior.
La tendencia es a la estabilización en números absolutos y a una mejora de la calidad. Y eso lo avalan también las cifras que aporta la Agència Valenciana de Turisme. Ahora mismo la provincia cuenta con 20 casas rurales de alto standing frente a los tres alojamientos de hace 4 años. “Hay una mejora clarísima en la calidad. Es cierto que han cerrado algunas casas rurales, pero muchas de las que quedan han apostado por ofrecer calidad y ese es el futuro”, defiende Pep Gómez, gerente de Altretur.
Las hay que cierran sus puertas, pero también hay empresarios que han optado por seguir invirtiendo. Es lo que ha hecho Juan Francisco Fuentes, que las pasadas Navidades inauguró la casa rural Al-Vir, un alojamiento de alta gama en San Rafael del Río. De momento, no le va mal, aunque reconoce que los números del sector nada tienen que ver con los de hace unos años. “Confío en que la crisis sea pasajera”, explica. En Caudiel, el Ayuntamiento acaba de sacar a licitación el arrendamiento de seis viviendas de turismo rural, mientras que en Morella es inminente la apertura del Cardenal Ram. H
