Siete de cada diez menores de entre seis y 18 años cuentan ya con un perfil en alguna de las redes sociales más conocidas, como Tuenti o Facebook, según el último estudio realizado por el Foro Generaciones Interactivas, fundado por Telefónica y la Universidad de Navarra. Se trata de una realidad que se vive en el día a día de los hogares castellonenses de un modo que preocupa mucho a padres y profesores castellonenses, quienes requieren más seguridad en internet para los adolescentes.

En un momento en el que la Comisión Europea acaba de pedir a las empresas que gestionan las redes que tomen medidas para proteger mejor a los niños, esta es una alerta que se despliega en Castellón, sobre todo, en dos sentidos. Por un lado, el de los riesgos que afrontan los adolescentes con la divulgación de información personal a través de la red. Por otro, se sitúan los conflictos que se generan en los centros escolares cuando se hacen públicas discusiones entre ellos, en ocasiones con palabras subidas de tono e inapropiadas.

En este sentido, el presidente de la Asociación de Directores de Secundaria de Castellón, José Martí, deja constancia de la “gran preocupación” que sienten los profesores porque, “a menudo, se cuelgan fotos en la red, los grupos de amigos hacen comentarios despectivos y, cuando llegan al centro, que es donde se ven, se producen los conflictos”.

Martí, quien asegura que “no estaría de más que hubiera alguna limitación” y aplaude “cualquier medida de control que se establezca”, afirma que “no se trata de cercenar la libertad de nadie, y no sé cómo se podría evitar lo que está ocurriendo, pero es necesario hacerlo”.

Por su parte, la presidenta de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Castellón, María Dolores Tirado, coincide en este planteamiento y expresa su convicción de que “debería haber una protección para los menores, porque no saben en realidad los riesgos que se plantean cuanto cuelgan fotos en las redes sociales”. Añade, por ejemplo, que antes, “había insultos en un momento dado en la calle y la cosa quedaba ahí, pero ahora los comentarios se hacen en las redes sociales, llegan a todos y también puede haber denuncias y consecuencias muy serias”.

Tirado concluye que “hay que controlar el uso que nuestros hijos hacen de internet, porque se están viendo casos muy dramáticos y es nuestra responsabilidad protegerles de esas situaciones”.

adicción// Al analizar qué ocurre con los adolescentes de la provincia y su uso de las redes sociales, el psicólogo castellonense Carlos Hidalgo parte de la base de que “hay que hacer un buen uso de algo que nos une y nos mantiene informados en tiempo real”, pero describe la realidad al señalar que “los chavales se protegen muy poco y viven su relación con internet con mucha adicción, parece que no pueden vivir sin estar conectados, hasta el punto de que cuando se cae la red, se vive como un drama, algo que hay que evitar poniendo límites”. H