El edil del PP, Jaume Llorens, criticó ayer que el alcalde de Vila-real, José Benlloch, “ha vuelto a tomar una decisión que va en contra de los intereses de la ciudad; en esta ocasión, ha decidido cerrar la oficina de turismo de Vila-real en pleno agosto pese a ser el mes turístico por excelencia”. Para el concejal popular, “supone una muestra más de que el equipo de gobierno no cree en Vila-real, ni en las oportunidades turísticas y que lo único en lo que cree es en vender humo”. Y denuncia “que desde el 2015 la mesa de turismo sólo haya celebrado su constitución, sin haber tratado ningún tema de fondo”. rd