Ya lo he dicho en alguna ocasión, pero hoy más que nunca me reafirmo en la peligrosidad de una nueva tendencia que se está extendiendo en nuestra sociedad, fruto del todo vale que están preconizando algunos a fin de conseguir sus objetivos, principalmente políticos.

Ahora es la alarma del ébola, igual que hace unas semanas eran otras cuestiones y la semana que viene, posiblemente serán otras. Las redes sociales se convierten en la mejor correa de transmisión de mensajes falsos, pero que calan entre la sociedad, a menudo asustada y desconcertada.

Según algunos jamás debería haberse repatriado a los misioneros enfermos (algo que sí han hecho otros países sin ningún debate público, seguramente porque no atraviesan la situación política que atravesamos nosotros), pero yo estoy convencido de que si no se hubiera actuado así, existiría el mismo revuelo por haberlos abandonado a su suerte.

Cualquier excusa es buena si el objetivo es atacar al poder establecido, ante lo que no me queda más que decir que, a quienes instigan este tipo de estrategias, les está saliendo muy bien la jugada, lo que es más que preocupante.

Yo, igual que cientos de ciudadanos, recibo mensajes de lo más variopintos, que pretenden hacer cundir el miedo y calentar la calle. Pero además, como muchos compañeros políticos somos el objetivo de amenazas y acusaciones sin fundamento escondidos, la mayor parte de las veces, en el anonimato que consienten las redes sociales.

Entre pretendo que se controlen estas aplicaciones, ni tampoco que la ciudadanía crea a pies juntillas la versión oficial si no es eso lo que quieren. Lo que pido es que la gente no se haga eco de bulos, mentiras y falsedades solo por el hecho de que aparezcan en su facebook o porque alguien se los envíe al Whatsapp.

Todos deberíamos preocuparnos por estar bien informados, porque vivir siempre con el miedo o el odio en el cuerpo no es vivir, y hacernos creer que detrás de cada puerta hay una conspiración es el arma que utilizan los que están en contra del sistema para destruirlo, sin tener en cuenta que pasará mañana.

*Alcalde de Nules y diputado provincial de Medio Ambiente