Las declaraciones de la vicepresidenta primera y portavoz del Consell, Aitana Más, en las que defiende la necesidad de abrir un debate sobre la prohibición de los bous al carrer, han provocado el rechazo de partidos políticos como el PSOE y han puesto en una difícil tesitura a los alcaldes de Compromís en Castellón, municipios donde se celebran este tipo de festejos y que, además, son uno de los actos más populares y que más impacto económico tiene. Los primeros ediles de Betxí, Borriol y Vistabella (tres de las cuatro localidades de la provincia en las que gobierna en solitario la formación nacionalista) abren la puerta a cualquier debate, sea del tema que sea, aunque acto seguido insisten en que el bou forma parte de la cultura y las tradiciones tanto de Castellón como de la Comunitat .

En Betxí, que del 16 al 24 de septiembre celebrará sus fiestas mayores y donde la programación incluye bous al carrer, su alcalde reconoce que este tipo de festejos está muy arraigado, aunque defiende «cualquier debate». Y preguntado sobre si es partidario de prohibir los festejos taurinos, Alfred Remolar responde que de lo que es «partidario es de abrir cualquier diálogo, con argumento y siempre desde el respeto».

Jordi Alcón, alcalde de Vistabella, insiste en que abrir un debate sobre el veto a los bous al carrer «no implica nada» y recuerda que los ayuntamientos tienen autonomía. «Si se prohiben o no tendrá que decidirlo la gente y , en el caso de Vistabella, serían los vecinos del municipio», argumenta. 

Alcón apunta asimismo que los actos taurinos forman parte de la idiosincracia de los municipios de Castellón (Vistabella concluyó el lunes sus fiestas con gran protagonismo de toros y vaquillas) y añade que si se cumple la normativa de seguridad «no tiene porqué pasar nada». Eso sí, considera también que en municipios más grandes, donde es más complicado controlar a todos los aficionados que asisten, sí haría falta revisar los protocolos de seguridad

Para el alcalde de Borriol, Héctor Ramos, el tema de los bous es «complicado», aunque apunta que «cualquier debate no me parece mal, al contrario, es positivo». Ramos, que no quiere entrar en polémicas, asegura que mientras no se maltrate al animal la fiesta no le parece mal y reconoce la gran afición que hay. Este rotativo intentó sin éxito ponerse en contacto con el alcalde de Argelita, también de Compromís.