Los inicios en un negocio en Castellón son siempre duros, pero también el apoyo financiero en el momento de su expansión. El Ministerio de Industria, a través de la Empresa Nacional de Innovación, SA, ha aportado 4,4 millones de euros en préstamos participativos a 37 proyectos innovadores en la provincia de Castellón en los últimos siete años, desde el 2014.

Los sectores más favorecidos, que han accedido a casi la mitad de este crédito, son pymes tecnológicas (16, con 1,6 millones de euros en total);y muy de cerca, la industria manufacturera (9, con poco más de un millón). El resto de beneficiarios proceden de otros servicios (6, con casi un millón de euros);actividades profesionales, científicas y técnicas (3, con casi 250.000 euros); bio (2, con 450.000 euros);y transporte y almacenamiento (con 100.000).

«La idea debe tener un fuerte componente de innovación, ser exclusiva y saber comunicarla»

Helios Rodríguez - CEO de Nespra Smart Devices

Dos momentos clave: despegue y expansión

Es llamativo que la línea de préstamos Enisa Crecimiento es la líder en cuantía (con 2,1 millones de euros), lo cual refleja la apuesta de muchas start-up castellonenses por crecer. Le sigue, en volumen de cuantías, el crédito a proyectos de competitividad, emprendedores en general y jóvenes; y por último, la de Agenda Digital. Durante los últimos tiempos el boom de crédito concedido (1,8 millones) y de proyectos (10) se vivió en el 2019, con cifras récord desde el 2014 (con tres proyectos y 230.000 euros), si bien el 2020 acusó la crisis a raíz del covid y solo se otorgaron dos de estos préstamos en la provincia (por valor de 290.000 euros). El prestigioso informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) España 2020-2021 ha corroborado que la tasa de actividad emprendedora se desplomó el año pasado, en especial, el colectivo femenino. 

«Los inversores valoran, incluso más que la idea, el tamaño del mercado y potencial del equipo»

Patricia García - CEO de Pandabox

Jornada para el 14 de octubre en Castelló

¿Cuál es la situación actual? Desde el Centro Europeo de Empresas Innovadoras (CEEI) de Castellón, sus técnicos destacan que «el estado de la inversión y financiación para start-up está en uno de sus mejores momentos en años, con mucho dinero en el mercado». Tras unas jornadas para presentar ayudas públicas de financiación para pymes y autónomos (del IVF, Enisa y CDTI);la segunda sesión de este ciclo tendrá lugar en el CEEI el 14 de octubre, a través de entrevistas bilaterales entre inversores privados y emprendedores. Las últimas start-up asesoradas por este centro versan sobre movilidad sostenible y electrificación, turismo, IA (inteligencia artificial) e IOT (internet de las cosas), y economía circular. Durante el 2020 tramitaron préstamos en coinversión (del IVF, que permite simultanear inversión privada y pública) en una horquilla «de 50.000 a 300.000 euros». Para el CEEI, además, otros principales de acceso a financiación son:

  1. Los clubes de inversores (BigBan Angels y Club de inversión Órbita, en la Comunitat)
  2. Fondos de inversión (los valencianos Draper B1, Think Bigger y Clave Mayor)
  3. Business angels y family offices.

El auge de la economía digital ha permitido modelos de negocio menos intensivos en capital (marketplace, ecommerce), que piden menos cuantía al inicio.

Testimonios: en primera persona

Entre las beneficiarias recientes de Enisa en Castellón, constan Pandabox (personal shopper de ropa infantil de diferentes marcas) y Nespra (tecnológica de servicios IOT, de gestión de sensores en la nube). La CEO de Pandabox, Patricia García, consideró que la etapa inicial es «la más difícil», y aconsejó «intentar comenzar con fondos propios el mayor tiempo posible, para recurrir a la financiación ya con resultados y mostrar más solidez al potencial inversor». El CEO y fundador de Nespra, Helios Rodríguez, valoró los créditos de Enisa, «sin aval», aunque lamentó la excesiva burocracia:«Nos apoyamos en una consultora para la tramitación. Y tardamos siete meses hasta que nos lo concedieron. Es mucho tiempo para una empresa que empieza». Ve clave «saber comunicar la idea, que sea exclusiva y con un componente fuerte de innovación».