La desaparición del mural de Juan Ripollés Tiriteros, Las niñas y los niños de Castelló a todos los niños y niñas del mundo, que ornamentaba la fachada del número seis de la plaza de la Paz de Castelló, ha generado decenas de reacciones en redes sociales.

Artista internacional 

Parte de los internautas lamenta el borrado de una obra de arte. «¡Qué vergüenza! ¡Un artista de reconocimiento mundial! ¡Solo ocurre en Castellón! Desde China a New York tiene un alto prestigio, pero aquí como somos borregos, ni respeto ni agradecimiento». «Me parece fatal lo que han hecho puede que algún día se arrepientan», señala uno de los mensajes. «Creo que lo deberían haber hecho de otra manera y se podrían haber puesto de acuerdo. Al final es la obra de un artista reconocido a nivel mundial, y me parece penoso que haya acabado así. Para mí el ayuntamiento no ha mostrado ningún interés en que se mantuviera el mural. La comunidad ha hecho lo que toca, arreglar la fachada», concluye un lector. 

Solidaridad con los vecinos

Y es que parte de ellos también se solidarizan con los vecinos. «Tengo el corazón partido. Por una parte, esos murales formaban parte de un museo al aire libre, como en Fanzara, para embellecer paredes medianeras de edificios demasiado altos para esta ciudad. Por otra parte, los vecinos tenían derecho a arreglar los problemas de fachada que tenían. En fin, lo hecho, hecho está», señala una castellonense. En la misma línea, otro post comenta: «Si la comunidad de vecinos ha decidido en junta pintar esa fachada tapando el mural, tiene todo el derecho a hacerlo. Y ni siquiera Ripollés o el ayuntamiento pueden decir nada». «Sigue siendo una pena. Hubieran podido hacer algo los del ayuntamiento», replica otra internauta.

Capilla Sixtina

Otros consideran que Ripollés no tiene por qué ser informado del borrado: «Y por qué le han de advertir, si es en sitio privado o aunque sea público si no es en propiedades suyas?» Y le contestan «Eres de los que al día siguiente de pintar Miguel Ángel el techo de la Capilla --Sixtina-- lo hubiera borrado porque el techo era tuyo».