El aforo estatal de la producción de cítricos para la próxima campaña se reducirá a 6,7 millones de toneladas, lo que supone una disminución del 4,8% respecto a la temporada anterior. El grupo de naranjas crecerá apenas un 0,4%, mientras que la previsión para mandarinas y limones es de un descenso del 9,9 y 11,4% respectivamente, según los datos hecho públicos ayer, miércoles.

Se trata de descensos que ya preveían los citricultores castellonenses, como informó Mediterráneo, y que sobre los que la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) aseguró ayer que el descenso de cítricos del 4,8 por ciento que prevé el Ministerio para esta campaña favorece precios aceptables en el campo.

A la espera de Conselleria

A falta de la publicación del aforo por parte de la Conselleria de Agricultura, AVA-Asaja estima que esta merma de cosecha de cítricos a nivel nacional «será similar o incluso ligeramente mayor en el ámbito de la Comunitat Valenciana, fundamentalmente Castellón y Valencia, a causa de los daños provocados por las plagas y enfermedades, especialmente el cotonet de Sudáfrica, y de las adversidades climáticas en forma de pedriscos y lluvias torrenciales».

Según las informaciones recabadas por esta organización, las variedades más afectadas son las clemenules en la mitad sur de Castellón y la mitad norte de Valencia --la zona más castigada por la mencionada plaga--, así como las naranjas navel tardías.

El presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, ha afirmado que estamos ante una producción de cítricos «estable y bastante corta que debería ser perfectamente asumible por los mercados y que no precisará de importaciones significativas de países terceros».

Hacer las cosas «bien»

«Si las cosas se hacen bien, el aforo previsto favorece que los productores puedan recibir unos precios aceptables que, en la mayoría de los casos, permitan compensar la bajada de la producción comercializada. No obstante, en términos de rentabilidad va a afectar el encarecimiento de hasta el 30% de los costes de producción, sobre todo por la falta de soluciones frente a las plagas y enfermedades que obligan a los agricultores a multiplicar el número de tratamientos con productos menos eficaces», ha apuntado el agricultor.

De acuerdo a los primeros boletines de la Mesa de Precios de Cítricos del Consulado de la Lonja de Valencia, «hay interés en las compras, aunque continúan lentas», «de manera muy selectiva», y «se centran en el grupo de clementinas», precisamente uno de los más diezmados por el descenso de producción.

AVA-Asaja atribuye el ritmo bajo de operaciones a que «los comerciantes están comprobando con lupa los niveles de afección de plagas y pedriscos que hay en cada parcela, porque si superan un cierto umbral deja de resultarles viable ir a recolectarlos».

Balance positivo

Esta nueva campaña seguirá a partir de este mes de septiembre para las variedades de fruta pequeña más temprana de la temporada 2020/21, que se cerró con un balance muy positivo. Tanto los consumidores españoles como los extranjeros incrementaron de forma notable su consumo en las primeras semanas de confinamiento, hasta el punto de que las exportaciones de la provincia en este apartado se dispararon en marzo un 36,59% respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos aportados por el Instituto de Comercio Exterior (Icex).