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los alojamientos rurales TIENEN RESERVAS DESDE HACE MES Y MEDIO

La inflación no puede con el turismo en Castellón y se prevé una buena Semana Santa

El bono viaje dispara las reservas en el interior y la subida de la gasolina da alas al cliente de proximidad. La costa confía en la última hora y hay hoteles que abren para recibir a partir del viernes a madrileños

Una pareja de turistas en una casa rural de Morella pide asesoramiento al empresario.

Castellón y en especial su turismo de interior está resistiendo el impacto de la crisis económica derivada de la inflación y la guerra de cara a la próxima Semana Santa. Las reservas rozan el 100% en el grueso de alojamiento y las llamadas para asegurarse una habitación en un hotel o casa rural «empezaron ya hace mes y medio» y se continúan recibiendo ahora, según resaltó el presidente de la Asociación de Turismo Rural (ATR), Joaquín Deusdad.

Estancias incluso entre semana en el interior

Uno de los secretos es más por menos. Es un momento con los precios, la energía y combustibles en escalada, gana el atractivo de pasar unas vacaciones de Semana Santa con un menor presupuesto. «Hay auténtica euforia por el bono viaje de la Generalitat, que permite viajar a bajo precio, con el descuento. La provincia de Valencia es el principal emisor hacia el interior de Castellón esta Semana Santa y utiliza este incentivo. Hay reservas de tres y de cuatro días, e incluso entre semana, pues hay familias con niños que se han cogido vacaciones y vienen a hospedarse la semana siguiente a la Semana Santa, la de Sant Vicent, también, algo que no siempre ha ocurrido», explica Deusdad. 

La provincia de Valencia, cliente nº1 más que nunca

Castellonenses y catalanes, en menor proporción que los valencianos, completan la demanda. Para Deusdad, aunque nunca se sabe, si el turista tuviera que anular, que ojalá que no, «pesa más la climatología como factor que la guerra o la crisis energética», señaló. Otro punto a favor que ha beneficiado al sector es que en este modo plan ahorro de los hogares, se prioriza un viaje a un destino cercano, con un desplazamiento corto en coche, para evitar un alto desembolso en combustible. En duración, gracias a la promoción del bono, por ahora en esta Pascua no se ha notado un recorte.

Panorámica de la ciudad medieval de Morella

Romerías y carreras de montaña, un incentivo de aquí al verano

Con todo, sí es cierto que les preocupa «qué pasará cuando se acabe la convocatoria del bono viaje, a finales de mayo». Por parte del Patronato Provincial de Turismo la previsión es que la buena onda siga para las casas rurales, pues «ya desde Fallas y hasta el final del verano los fines de semana tienen buena ocupación, debido también a los eventos, como romerías y carreras de montaña, que generan pernoctaciones en muchas localidades. 

La costa sufre un poco más, pero es optimista

¿Y qué ocurre con la zona costera? Muchos hoteles están ya abiertos y otros esperan ponerse a punto justo hoy, 4 de abril, de cara a alojar para sus vacaciones de Pascua a los turistas que han reservado procedentes de Madrid. «Allí tienen antes las vacaciones y por ello las primeras llegadas se esperan antes de la Semana Santa, este mismo viernes, 8 de abril, pues también se acaban las clases para quien viene con niños», apuntan desde el sector.

«Esperamos que progresivamente se vaya abriendo toda la planta hotelera en las próximas semanas», aseveró el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo (Ashotur), Luis Martí. Pero aunque la expectativa para esta campaña es «mejor que la del 2021», tanto las reservas como la contratación se esperan, más que nunca, «a última hora, dado que la coyuntura económica no permite anticiparse mucho y nada es seguro», indicó. Hace un par de semanas el Patronato Provincial de Turismo situaba la costa al 75% de ocupación y un 80% al interior. 

Panorámica de Peñíscola, en una imagen de archivo. Mediterráneo

Viajes en grupo, pero pequeños

Un estudio presentado esta semana por el Ministerio de Turismo y la consultora ForwardKeys dio otra clave y es que «esta Semana Santa se superan las expectativas iniciales, sin llegar a la prepandemia. La duración de la estancia sube ligeramente y los grupos de 3 a 5 personas elevan su cuota frente a parejas y grandes grupos». 

Una campaña complicada. La hostelería sale al rescate de trabajadores del azulejo

  • La Semana Santa es una de las campañas por excelencia de creación de empleo en la hostelería, aunque sea temporal, y en general marca los datos de contratación en la provincia de Castellón y toda España con una curva ascendente. Este año afecta de lleno la implantación de la nueva reforma laboral --en vigor desde el 1 de abril-- y se une la incertidumbre por la cifra definitiva de turistas que nos visiten, en especial en la costa, para calcular los refuerzos necesarios. 
  • «El impacto de la inflación, la guerra de Ucrania, la normativa laboral y la crisis energética genera muchas dudas en reservas y contratos», indicó el asesor laboral de Ashotur, Emilio Pin. El vicepresidente de la patronal turística, Luis Martí, agregó que la previsión es «crear más empleo que en 2021 pero menos que en 2019, sobre todo, los profesionales más necesarios que se buscan son cocineros, camareros y personal de mantenimiento».
  • Con todo, algunas empresas sí están cerrando ya contratos. Carlos Salas, consultor de selección en la central de Grupo Noa’s señala que hay establecimientos que «para Semana Santa, sí han adelantado las previsiones de contratación con el fin de asegurarse el cupo de empleados que necesitan». Y añadió Salas que «desde que estamos en pandemia, se augura la mejor campaña de todas, llegando incluso a niveles precovid. Inicialmente había dificultad para cubrir las vacantes, pero debido a que muchas empresas del sector cerámico están en ERTE, algunos trabajadores de ese sector han aceptado ofertas del sector hostelero para ir tirando», valoró. «¿Cuáles son los perfiles más demandados? Sobre todo, camareras de piso, camareros y ayudantes de cocina», concluyó. 


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